Un espacio para aprender que no es necesario ser una empresa grande para ser una Gran Empresa
Home » Recursos Humanos » Cómo motivar a los empleados en 10 pasos

Cómo motivar a los empleados en 10 pasos

Por Sophia Cross

Motivar a tus empleados es indispensable para el éxito de tu compañía. No puedes tener un negocio próspero cuando tus empleados trabajan lento, llegan tarde y se comportan de una manera inadecuada. A menudo este tipo de conductas es el resultado de la falta de motivación o del sentimiento de ser menospreciado. Los gerentes y los dueños de los negocios se benefician por igual cuando le dan a los empleados razones para desempeñarse lo mejor posible. Los factores de motivación incluyen el reconocimiento verbal, regalías monetarias, incremento de responsabilidades y ayudas en el logro de sus metas profesionales.

Instrucciones

  1. Pregúntale a tus empleados qué es lo que quieren y escúchalos. Algunas personas se motivan con la perspectiva de más dinero, pero para otras, es la posibilidad de más tiempo libre. Y otros quieren más retos en el trabajo y mayor responsabilidad. Cada persona tiene sus propias razones para sentirse motivada. El hecho de que te tomes el tiempo para escuchar a tus empleados es un gran motivador para empleados que pudieron haberse sentido menospreciados anteriormente.

  2. Crea un plan de acción. Después de haber hablado y escuchado a tus empleados, siéntate con ellos y proyecten juntos un plan para el éxito. Participa en conversaciones individuales con cada miembro de tu equipo, dándole a cada persona un objetivo claro y una expectativa de rendimiento. En el trabajo, todas las personas prefieren objetivos claros en lugar de generalidades. Si tu empleado no tiene las cosas en claro sobre tus expectativas, gastará más tiempo imaginando qué es lo que tu quieres en lugar de hacerlo.

  3. Predica con el ejemplo. Si tu compañía tiene una fuerte ética de trabajo, pero tu siempre te vas temprano a tu casa, no puedes esperar que tus empleados se sientan motivados. Si tu esperas calidad y dedicación de tus empleados, muéstrales cómo se hace. Un buen líder entiende que las acciones son más importantes que las palabras, y por ello, lo que tu hagas tiene una influencia motivacional más fuerte que tus palabras.

  4. Mira a tus empleados para encontrar señales de qué realmente los motiva. Un buen gerente presta atención a la conversación no verbal que sus empleados dan. Que uno diga qué lo motiva puede realmente ser diferente a cómo actúa. Esto no es necesariamente ser mentiroso. Sin embargo, puede ser el resultado de un error en el cálculo de lo qué el realmente quería. Por ejemplo, una persona que dijo que quería trabajar en un proyecto prestigioso se dio cuenta que no disfruta el trabajo tanto como pensó que lo haría. En este caso, habla con el empleado otra vez para descubrir cómo pueden unirse para trabajar juntos para lograr objetivos mutuos.

  5. Brinda la cantidad apropiada de estímulos a cada uno de los miembros de tu equipo. Ninguno quiere trabajar sin sentir si alguien aprecia su duro trabajo. Mientras algunos disfrutan la alabanza pública, otros prefieren un enfoque de halago más discreto. Un rápido “buen trabajo” o “gracias por tu duro trabajo” son todo lo que los empleados necesitan para sentirse motivados para complacer al jefe. Si tu crees que un empleado ha hecho un considerable buen trabajo, considera dejarle una tarjeta de agradecimiento en su escritorio o en una reunión privada.

  6. Delega tareas. Esto demuestra que tienes fe en tu equipo para que el trabajo se haga. Delegar a los miembros de tu equipo los estimula a proponer mejores formas para solucionar problemas, crear procedimientos más eficientes y desarrollar nuevos productos. Establece un objetivo claro para aquellas tareas y bríndales la titularidad de la tarea. Los empleados que disfrutan del aumento de responsabilidades se motivarán para hacer el mejor de sus rendimientos.

  7. Estimula a tus empleados para incrementar su conocimiento. Cuando muestras un interés genuino en las metas profesionales de los miembros de tu equipo, ellos estarán más a gusto de trabajar duro para ti. Dales a tus empleados la oportunidad de aumentar su conocimiento y sus habilidades, y proporciónales conexiones que necesiten para hacer realidad sus sueños. Como resultado de tu interés en sus objetivos a largo plazo, tus empleados posiblemente se quedarán largo tiempo en la compañía, trabajando para subir posiciones. Esto te beneficia a ti y a la compañía en que tienes un experta fuerza familiar en el funcionamiento interno de tu negocio particular.

  8. Mantén las habilidades de los miembros de tu equipo y su entrenamiento actualizados. Las nuevas tecnologías emergen diariamente, y el entorno empresarial competitivo de muchos profesionales requiere un conocimiento cada vez mayor de las últimas actualizaciones. Ya sea que tu trabajo consista en extraer y almacenar datos electrónicos, o si estás involucrado en las ventas, estar al tanto de las actualizaciones pertinentes de productos nuevos puede ayudar a optimizar las prácticas de negocios. Los empleados que utilizan equipos antiguos y obsoletos pueden sentir como si la empresa no se preocupara lo suficiente por ellos para invertir en herramientas de alta calidad.

  9. Resuelve los conflictos de manera rápida y de manera limpia entre los empleados. Mientras esto no parece ser un obvio factor motivacional, lo es. Una resolución decisiva y razonable a los problemas de oficina ayuda a motivar a los miembros de un equipo mostrándoles que tu tomas sus necesidades seriamente. Un alborotador percibido puede que sea un empleado preocupado en llamar la atención sobre las prácticas inseguras o prácticas de negocio no éticas hechas por sus compañeros de trabajo. Abstenerse de los prejuicios es la mejor solución. Escucha las quejas y los problemas e investiga el problema antes de tomar tu decisión. Los trabajadores que se den cuenta que el jefe es justo son más propensos a sentirse motivados para desempeñarse correctamente.

  10. Descubre cómo hacer que tu gente se mueva. Frank McNair, el autor de “The Golden Rule for Managers”, dijo que no puedes motivar “monigotes” con zanahorias. Esta metáfora trae a la luz una diferencia en el núcleo entre dos tipos de personas: aquellas que se motivan por recompensas, y aquellas que se motivan por el miedo. Si algunos miembros de tu equipo, después de haber recibido recompensas positivas y halagos, no están trabajando a su mejor capacidad, despide a uno para motivar a los otros. La terminación de una relación de empleo es la vía que resulta por último después de que todos los otros esfuerzos hayan fallado.

    Fuente: http://www.ehowenespanol.com/motivar-empleados-10-pasos-como_136244/

Lectura relacionada  Innovar desde las personas. 10 fundamentos de un cambio paradigma

Si quieres ver más posts de la misma categoría, haz click aqui:


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.