En años recientes surgió toda una industria de consultoría (junto a su respectiva demanda) en la cual se predica utilizando un léxico Leer más..." />
En años recientes surgió toda una industria de consultoría (junto a su respectiva demanda) en la cual se predica utilizando un léxico en el que abundan palabras tales como revolución, reinvención, cambio cuántico, pensamiento superador, metas audaces, aprendizaje organizacional,… etc… Todos estos modelos e ideas son fantásticos, pero carecen de importancia práctica a menos que seamos capaces de traducirlos en pasos concretos de acción. Sin disciplina de ejecución, el pensamiento superador se derrumba, el aprendizaje no suma valor, la gente no alcanza su metas audaces, y la revolución se paraliza.
Ninguna empresa puede entregar los resultados que promete o liderar el cambio, sin líderes que practiquen la disciplina de la ejecución a todo nivel. La ejecución tiene que ser parte de la estrategia de una organización y de sus metas. Es el eslabón perdido entre las aspiraciones y los resultados.
Para entender la ejecución es preciso tener en mente tres puntos claves:
El primer ladrillo con el que se construye la ejecución está compuesto por siete comportamientos esenciales a desarrollar por todo líder de negocios:
Fuente: Execution, the discipline of getting things done, Larry Bossidy & Ram Charan
Tomado del blog Puerto Managers (www.andresubierna.com)