por Juan Sebastian Céliz Maya

Hoy quiero mencionar un tema, el cual he venido evidenciando de una u otra manera en la sociedad, ya sea por las tradiciones más arraigadas, o por simples paradigmas (actitudes que no sabemos de donde vienen, pero que igual las tenemos)… estoy hablando de la predisposición al fracaso. “Predisposición es la disposición anticipada del ánimo del individuo para un fin concreto.”

Cuando una persona se propone realizar una tarea presenta un determinado estado afectivo, una disposición anímica, frente al objeto de la acción.

Indudablemente, ésto condiciona al individuo en su empeño, e influirá, por tanto, en el logro de sus fines. Un ejemplo de este hecho lo podemos observar en el deporte; ante una competición, el deportista se concentra, reúne sus potenciales físicos y mentales para que, en los instantes siguientes su rendimiento corporal sea máximo. Está predisponiendo su persona para una acción que requiere plena capacidad. Un competidor que se sienta derrotado antes de la contienda difícilmente podrá ganar: está predispuesto al fracaso. 

Igualmente, esto que ocurre en el terreno deportivo, puede hacerse extensivo a la vida cotidiana: un trabajador ante su tarea, un estudiante ante el examen, un aspirante ante una entrevista, etc. Su acondicionamiento, lo puede llevar tanto al éxito como al fracaso. 

cuando, coloquialmente, decimos: «hoy parece que me he levantado con el pie izquierdo». ¿Es esto sólo producto de la casualidad? ¿O será consecuencia de una «mala» predisposición de nuestro ánimo que, indefectiblemente, nos ha conducido al continuo fracaso durante el día?

Pues inevitablemente no se trata de una casualidad. Se trata de una pre-programación de nuestra mente -basada en nuestros miedos y temores- a creer que las cosas que haremos, las haremos de manera errónea.

La buena noticia es: que es posible evitarla!

Pero no es tarea sencilla. De hecho, es como cambiar cualquier otra costumbre que tengamos en nuestra vida cotidiana, de tal manera que la adaptación a la costumbre de predisponerse al éxito y no al fracaso puede tomar variosdías. Pero, será que vale la pena? claro!

Recomendaciones para evitar la predisposición al fracaso:

• Intenta mejorar tu autoestima: deberías enfocarte en tener un mejor concepto de ti mismo, en el sentido en que ésto reafirmará tu autoconfianza y predisposición al éxito y no al fracaso
• Si quieres ser fuerte, empieza por hacerte el fuerte: cuanto más te convenzas de tus habilidades, más se manifestarán ellas en tu vivir diario. Evitarás sin darte cuenta las actitudes que conlleven las desventajas de fracasar.
• Deja de pensar como todos los demás: si quieres ser diferente, no hagas siempre lo mismo, y sigue exclusivamente el consejo de aquellos que han logrado lo que tu quieres
• Predisponte al éxito, no al fracaso: como lo dije anteriormente, “Predisposición es la disposición anticipada del ánimo del individuo para un fin concreto.” entonces que dicho fin, sea tener éxito en tus actos.
• Mira como lo hacen los exitosos: si ves la forma de actuar de alguien exitoso, notarás que en cierta forma, es diferente de todos los demás. Aprende de ellos

Autor Juan Sebastian Céliz Maya

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