Steve Jobs contaba con apenas 56 años.

Anoche el sitio de internet de Apple anunció su muerte.

En un garaje fue el cofundador de la que fue luego, con el paso de los años, la empresa más valiosa del mundo.

Cambió totalmente la forma en la que todos los consumidores interactúan con la tecnología. Fue una de esas personas únicas, inquietas, incansables, que siempre buscaron formas de innovar y crear valor.

En junio de 2005 habló en la ceremonia de graduación de la Universidad de Stan-ford. Fue lo más cerca que estuvo de una graduación, dijo, dado que abandonó sus estudios. Dejó a estudiantes una frase que lo define por entero: «Sigan con hambre, sigan haciendo tonterías».

Se refería a que todos deben tener el coraje de seguir al corazón y a la intuición. Sabía que el tiempo era limitado y por ello recomendó no gastarlo «viviendo la vida de otro». Definió a la muerte como «el mejor invento».

Es el agente de cambio de la vida porque «retira lo viejo para hacer lugar a lo nuevo».

Todos inexorablemente pasamos por lo mismo.

En su caso fue demasiado temprano.

Se lo extrañará…..hasta sus competidores.

Fuente http://www.ambito.com/diario/noticia.asp?id=605405