Por Carol Tice

Recientemente se dio a conocer que Jim Sinegal, el exitoso CEO de Costco, planea retirarse este año. Por cierto, la noticia me trajo muchos recuerdos, pues durante siete años me tocó cubrir las actividades de la compañía para un periódico regional de Seattle, EE.UU. Este directivo en particular siempre me pareció una buena persona, pero sobre todo, un ejemplo excepcional de cómo dirigir una gran firma.

Sinegal jugó un papel primordial para convertir a Costco en la tercera empresa de retail más grande de la Unión Americana. Esto al crear un modelo genuino que recompensa a los trabajadores, aun cuando sus competidores eliminaron beneficios laborales.

Por ello, hay por lo menos cinco prácticas de Sinegal, en su rol como CEO, que todo dueño de negocios debería seguir.

1. Usa tus productos. Este directivo a menudo se viste con camisas de US$17 de Costco, que son ya un emblema del departamento de ropa de la empresa. Incluso, las luce con orgullo en las reuniones anuales de la compañía.

2. Sé accesible. Una de las cosas que más me impactó de Sinegal es que en su oficina –ubicada en el pasillo del complejo de Issaquah, en Washington– la puerta siempre está abierta; no hay ni siquiera un vidrio o pared entre él y el resto de los empleados. De hecho, una vez me dio su celular, cuando la mayoría de los ejecutivos de ese nivel prefiere dar el número de su asistente. Es decir, no existen las barreras alrededor de este CEO.

3. Trata muy bien a tus colaboradores. Costco es conocido por ofrecer salarios por encima de la media a sus trabajadores. El resultado es que hay poca rotación de personal, bajos costos de capacitación y un sentido de pertenencia hacia la empresa.

4. Mantén una actitud humilde. A pesar de dirigir un emporio de US$76,000 millones, Sinegal es honesto, directo y tiene los pies en la tierra. La última vez que lo visité, su escritorio era barato, tan sólo una mesa plegable de formaica. Creo que se trataba de un producto de Costco que estaba en oferta. Y detrás de él, había un pizarrón viejo. Nada de pisos de madera o elegantes pizarrones blancos como suelen tener otros directivos de alto nivel.

5. Siempre escucha a los demás. No importa si una tienda se inaugura al otro lado del mundo, Sinegal está ahí. El objetivo: hablar con los clientes y empleados de la nueva sucursal para seguir aprendiendo directamente de ellos sobre cómo servirlos mejor.

Un buen líder sabe generar un clima laboral agradable y permite que su equipo crezca.

Autor Carol Tice

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