En el marco socioeconómico actual, las personas pasan cada vez más tiempo conectadas al submundo online por su trabajo o intereses, y la media de este hábito va en aumento a medida que el relevo generacional se renueva.

Tanto para la empresa como para el profesional independiente, surge la ventaja de aprovechar las posibilidades que los medios digitales les brindan en términos publicitarios, según cada caso y etapa del modelo de negocio puede que invirtiendo tiempo, dinero o ambos, ya sea por propia iniciativa o bien realizando acciones de marketing a través de agencias o estudios especializados.

Como en todo, en el marketing online también juega un papel importante la experiencia, a veces a base de ensayo y error, sobre todo dependiendo de las características del mercado.

Sin embargo, existen una serie de pasos básicos que te indicamos a continuación para plantear la campaña, y que te ayudarán a tomar conciencia para seleccionar y hacer un buen uso de los recursos.

Leyendo la totalidad de este artículo te darás cuenta de que aspectos que se tratan al final pueden influir decisivamente en las etapas del inicio formando un circulo o cadena.

El público objetivo, ¿a quién va dirigido el mensaje?

Determinar el tipo de público o usuario al que le pueden resultar interesantes nuestros servicios es lo más importante.

Tener en cuenta factores con la edad, el sexo, la localización geográfica, el entorno y los hábitos de consumo son aspectos esenciales , ya que posteriormente algunos de los medios que podremos utilizar para llegar a estos posibles consumidores nos permitirán segmentar el mensaje para dirigirlo a diferentes grupos de población.

El contenido del mensaje y su contenedor

Las ventajas del producto sobre otros o sus particularidades para diferenciarlo, el valor que aporta o la utilidad que conlleva utilizarlo, son aspectos que hay que organizar para poner de relieve de formas creativas y originales.

También es posible que este mensaje deba cambiar su configuración al mostrarse según el tipo de soporte y formato que se utilice, como por ejemplo, banners de diferentes dimensiones o formatos, infografías, videos, etc… permitiendo en unos casos mayor extensión en la narración o por el contrario importantes limitaciones de espacio y legibilidad.

Comienzo de la campaña, temporalidad y horarios

Aunque sea algo evidente, conviene destacar que ni todos los servicios y productos son para cualquier época, ni para utilizarlos durante todo el tiempo, y en muchos casos ni siquiera para cualquier momento del día.

Establecer la fecha má adecuada para el comienzo de la campaña, nos ayuda a dar en la diana, así como afinar durante ese tiempo en las franjas horarias más oportunas, en la medida de lo posible claro, ya que no todos los canales nos permitirán hacerlo.

Medios y canales

Aunque en la mayoría de los casos es aconsejable combinar varios canales para llevar a cabo la estrategia, puede que en algunos de ellos no se consideren adecuados por cumplir nuestras expectativas, o simplemente por no dinamizar o suponer limitaciones con el tipo de producto que queremos ofrecer.

De entrada, el sitio web en su conjunto, el blog tanto si está integrado en el sitio (mucho mejor) como si no, o las páginas de aterrizaje en las que se dispondrán las virtudes del producto, deben conservar una estructura y semántica adecuada para la correcta interpretación de la información por los buscadores, y los contenidos a la vez incluir encabezados, palabras clave relacionadas, descripciones y etiquetas, estas últimas también en el caso de las fotografías y archivos multimedia si fuera necesario incorporarlos.

Posteriormente, campañas de pago por click (CPC), o de tipo display por medio de banners, el envío de boletines electrónicos por email para informar o fidelizar al cliente, y la promoción e interacción a través de las diferentes redes sociales con el público, podrán formar parte del conjunto de la estrategia.

El sentido de la campaña

Quizás el transfondo del marketing tenga como finalidad aumentar las ventas y los beneficios, pero también se pueden orientar los esfuerzos al reconocimiento, la reputación o notoriedad de la marca corporativa o personal, favoreciendo la conversión a largo plazo.

Tener claro desde el principio el objetivo que se persigue ayudará más adelante a valorar la rentabilidad obtenida por el esfuerzo y recursos invertidos.

Recoger y analizar los datos para mejorar

Las campañas de marketing nacen, crecen, se desarrollan y mueren, solo tiene sentido aumentar su permanencia en aquellos casos en los que la aceptación supere las expectativas, pero sin llegar a agotar la paciencia o el intelecto del espectador.

Medir, medir y volver a medir para estimar la respuesta y aceptación, o las reacciones del público a la difusión de los materiales, es fundamental para mejorar esta u otra nueva campaña en el futuro.

Por supuesto, para hacer una estimación de los resultados, al final, el éxito de todo lo confirmará el hecho de que el fruto recogido sea proporcional a lo sembrado en términos positivos.

Conclusiones

En la práctica, poner en marcha un proyecto de marketing digital conlleva una buena dosis de minuciosidad, en la variedad de los métodos que utilicemos está el gusto, y por supuesto cuidar o no los detalles suele repercutir en el engagement de la campaña.

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