Una genial entrevista a Andy Freire

Reportaje de Clarisa Herrera

En la vida de Andy Freire, el emprendimiento más que una constante, es la columna vertebral de su vida.

Con sólo 40 años, se define como un emprendedor tanto del mundo empresarial como del mundo social. Luego de comenzar su carrera en Procter & Gamble, Andy co-fundó y lideró Officenet (adquirida por Staples en el 2004), una compañía que revolucionó la industria de distribución de material de oficina en Latinoamérica y fue caso de estudio en las principales escuelas de negocios del mundo.

Andy también co-fundó Axialent donde operó como Chairman y CEO hasta diciembre 2011, Restorando.com y de muy joven, la Fundación Iniciativa, una ONG enfocada en promover el liderazgo en los jóvenes argentinos. Además es el Presidente de la Fundación Endeavor en Argentina, Ex-Presidente del Directorio de Young Presidents Organization (YPO) en Argentina y es también miembro del Comité Global latinoamericano del Foro Económico Mundial.

También cuenta con presencia usual en medios, disertaciones y universidades, como referente en entrepreneurship. En su apretada agenda, se hizo un espacio para hablar con PulsoSocial de los principales obstáculos que encaran los emprendedores, de modelos de negocios y de la estigmatización del fracaso.

Clarisa Herrera ¿Coincidís que el principal problema del emprendedor sigue siendo sentarse frente a un inversor?

Andy Freire: Generalizar siempre es peligroso, sin embargo creo que eso es así. Se suele encarar ese desafío desde una postura de debilidad, sin embargo es importante tener en claro lo siguiente: el proceso de búsquedas de inversiones debe ser un proceso de beneficios mutuos, tanto para el emprendedor como para el inversor.

Si partimos de ese supuesto no debemos enfrentar a un inversor con miedo sino con respeto y con la convicción necesaria para sostener con firmeza una postura. El emprendedor necesita del inversor pero no es menos cierto que los inversores tienen la necesidad de emprender.

CH En tu trato diario con el emprendedor ¿Cuál identificás como la principal falla y virtud?

AF Para poder encarar al inversor con seguridad habrá que haber hecho los deberes. O sea un trabajo intenso para presentar un proyecto que no de lugar a dudas. El plan de negocio es un proceso vital para todo emprendimiento. Para algunos emprendedores esto parece no ser tan claro.

Por otro lado, si tuviese que destacar una virtud, sin lugar a dudas señalaría que el emprendedor argentino tiene una capacidad extraordinaria para adaptarse a los escenarios cambiantes que presenta la realidad política-económica del país, y encontrar en ellos oportunidades.

Las dificultades que plantean las situaciones externas -una crisis económica o una traba comercial- parecen haber entrenado a nuestros emprendedores a encontrar respuestas creativas que potencian sus ideas y estrategias.

CH ¿Cuál es tu recomendación a la hora de buscar financiamiento? ¿Qué variables se deben tener en cuenta?

AF Para poder determinar cómo conseguir financiamiento antes es importante saber dónde buscarlo. Por eso hay que tener en cuenta que existen diferentes fuentes para obtener el capital que haga factible la operación del proyecto.

En general existen tres grandes fuentes: buscar que tus proveedores te financien a través de la compra a largo plazo de pagos; conseguir un socio capitalista que tendrá una porción del capital de la empresa a cambio de su aporte; un socio que también trabaje y que aporte capital.

Si bien los Bancos constituyen una fuente de financiamiento importante para emprendedores, generalmente esto no sucede en sus etapas iniciales sino una vez que los proyectos están encaminados, con vistas a expandirse y crecer.

Esto ocurre porque los bancos exigen que sus deudores cuenten con activos que respalden los créditos contraídos y que el riesgo de su recuperación sea bajo, condiciones que no cumplen los emprendimientos que recién empiezan. Pero además para el banco resulta una inversión riesgosa ya que no existe un historial que muestre la evolución del proyecto y los resultados son difíciles de predecir.

CH ¿Cómo llegar hacia inversores que apuesten más al riesgo?

AF En principio confían en la visión y las habilidades del emprendedor -sin esa confianza no pondrán 1 centavo en el proyecto-. Entienden las prioridades del negocio en las primeras etapas y son pacientes con respecto a los resultados.

Pero conseguir un inversor requiere de un gran trabajo, preparación y planificación. Mostrando que sos la persona más capacitada para llevar ese proyecto adelante y sobre todo dándole los argumentos para que puede responder la gran pregunta: “¿Por qué este equipo emprendedor va a tener éxito?”

CH ¿Apostar a copycat o ideas que rompan el mercado?

AF Existen estudios que muestran que el 90% de las ideas que se ponen en marcha surgen de la actividad que el emprendedor estaba desarrollando anteriormente. Sólo el 10% restante surge como un “flash de inspiración”. ¿Qué hacemos generalmente cuando decidimos emprender? Buscamos la gran idea, esa idea genial, única y brillante, que a ningún otro se le haya ocurrido, que “rompa el mercado”.

Considero que esa mecánica de esperar la “gran iluminación” puede ser peligrosa si es que nos conduce a una dinámica de pensar, pensar y pensar, en lugar de actuar, actuar y actuar. Creo que toda persona que quiera emprender debe embarcarse en un proceso deductivo de acción, más que de pensamiento.

Esto supone un procedimiento muy metódico para entender cuáles son las ventajas competitivas, pasiones que lo movilizan y los sectores en los que podría brillar ofreciendo algo que el mercado no recibe en la actualidad. Bajo esa perspectiva es conveniente mirar las ideas a partir de su potencialidad de explotar un contexto determinado y no tanto desde el modelo del cuál provenga -Copycat o iluminaciones-

CH ¿Un copycat es menos riesgoso si originalmente fue exitoso?

AF Es mejor escapar a las dicotomías y profundizar en lo esencial de las cuestiones.

Si me preguntás ¿En dónde me conviene apostar a copycat o ideas que rompan el mercado? Mi respuesta es que apuestes siempre a ideas que presenten algún grado de originalidad (este criterio no excluye a los copycat), que exploten una oportunidad, que estén impulsadas por un equipo que pueda mostrar porqué tendrá éxito, que tengan posibilidades de crecimiento a futuro y que estén orientadas hacia el mercado. No importa de qué modelo provenga.

No es del todo cierto que un copycat tenga menos riesgos por haber sido exitoso en otro lugar. Existen innumerables casos de emprendimientos de este tipo que tienen un suceso impresionante en un contexto y fracasan en otro. Por eso lo importante es analizar la adecuación de la idea a un entorno determinado, y no si es una adaptación o una idea original.

CH ¿Cómo salirse de una cultura que suele estigmatizar los fracasos?

AF Del fracaso se debe aprender, no existe otra forma sana de convivir con él. Sin embargo es común encontrarse con casos donde el emprendedor siente frustración, vergüenza y pierde la confianza para seguir intentando.

Es que entre los emprendedores argentinos, y en la sociedad en general, existe efectivamente una suerte de estigmatización del fracaso. Aprender a lidiar con él es una habilidad que los emprendedores debemos adquirir e imitar de otras partes del mundo.

En Estados Unidos, por ejemplo, existe una filosofía totalmente diferente al respecto. Allí un emprendedor que fracasa no lo esconde, al contrario, lo destaca en su CV porque considera que esa experiencia le dio un valor agregado, y así también lo hace el resto de la sociedad. El desafío entonces no es responder qué se aprende en un fracaso -que eso dependerá de cada caso puntual- sino que es entender que el fracaso es parte de un proceso que sólo atraviesan los que intentan, proponen y asumen riesgos.

Clarisa Herrera Lafaille Licenciada en Comunicación Social. Periodista especializada en marketing, branding y analista de medios. Docente de Periodismo y Comunicación. Investigadora de tendencias, hábitos y comportamientos sociales aplicados a negocios. Editora de contenidos. En Twitter: @theguapa