7 cosas que los grandes emprendedores saben

por Alejandra Casanova

Todo empresario debe entender que para triunfar es necesario arriesgarse, tener el enfoque en lo importante y contagiar su pasión.

El liderazgo no está en el ADN. No existe un código genético para convertir a un director ejecutivo o empresario. Todos nacen prácticamente iguales. Lo que ocurre después, infancia, desarrollo, educación, experiencia, comportamiento y decisiones es lo que define a un líder.

Puede sorprender, que el hecho de crecer con nada, no disminuye las probabilidades de lograr grandes éxitos en la vida. Al contrario, crecer con adversidad, en un ambiente competitivo, puede tener un impacto positivo en la carrera. Todo depende de cómo se use esa experiencia.

Aunque no existe una fórmula para el éxito, sí hay algunos temas comunes en aquellas personas que sobresalen.

A continuación siete cosas que todos los emprendedores grandiosos saben:

1. Esfuerzo y trabajo duro:  Se recibe de la vida, lo que en ella se pone. No existen los atajos al éxito, que puedan ayudar a alcanzar grandes cosas sin trabajar muy duro.

2. Saber cómo enfocarse: La primera regla de una startup es el enfoque. Primero, se enfoca en encontrar un buen concepto o idea. Después, en demostrarlo. Luego en entregarlo y obtener tracción de los consumidores. Lo que sigue es escalar el negocio. Enfocarse en cómo se hacen las cosas.

3. Conocerse: Se pasa buena parte de la vida tratando de encontrar y de entender qué es lo que se quiere hacer. Es importante conocerse, porque únicamente sabiendo quién se es  y de qué se es capaz; se podrá tener la oportunidad de hacer cosas extraordinarias.

4. Cómo influenciar a los demás: Los emprendedores grandiosos se apasionan por su trabajo. Siempre hay algo que necesitan demostrar o alcanzar. Ese tipo de obsesión desesperada es la que impulsa y motiva a los que lo rodean. Es instintivo y contagioso.

5. Cómo funcionan los negocios: En  algún punto, todo gran emprendedor aprende cómo funciona el mundo de los negocios. Capitalización, ventas, clientes, relaciones, negociaciones, etc. Se puede delegar algunas de estas tareas, pero se deben entenderlas primero.

6. Cuando se escuchan mentiras: Docenas de emprendedores se rodean de personas que en todo están de acuerdo y que adulan al ejecutivo. Tarde o temprano, el no recibir una retroalimentación honesta termina afectando al empresario.

7. No hay recompensa sin riesgo: Hoy en día cualquiera se llama a sí mismo emprendedor; pero si no se está arriesgando algo. Si fuera fácil o seguro, todo el mundo lo haría.

Finalmente, cuando se emprende un negocio, se está dispuesto a apostarlo todo, porque de lo contrario es mejor conseguir un empleo. Pero si se tiene lo necesario para triunfar, es vital tomar estos conceptos fundamentales y usarlos.

Alejandra Casanova – Banca y Negocios / Soy Entrepreneur