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Delegar bien o mal no es solo responsabilidad tuya

por Francisco Lehmann

Delegar bien o mal no es solo responsabilidad tuya. Mucho depende de tu experiencia, pero también de la cultura de la empresa en la que te encuentras y de la capacidad de los colaboradores que te acompañan. La lista de comprobación que encontrarás en este post te ayudará a diagnosticar tu situación personal respecto a la delegación. Pero también te resultará una ayuda para diagnosticar esta situación respecto a la empresa y al equipo de colaboradores que tengas. Podrás así decidir si las actitudes y los hábitos existentes, frente a la delegación, son los que crees adecuados.

Para ir directo al centro del tema lee con cuidado cada una de las preguntas incluidas en cada una de las 3  listas de chequeo (pasos 1,2 y 3) que están más abajo.

  • La lista de chequeo Paso 1. Se refiere a tu propio comportamiento, a tu caso en particular.
  • La lista de chequeo Paso 2. Está orientada al análisis de tus colaboradores respecto del acto de delegar.
  • La lista de chequeo Paso 3. Tiene que ver con el estilo de delegación y la cultura de la organización.En estas tres listas de chequeo podrás responder por SÍ o por NO a cada pregunta, marcando el casillero correspondiente. Lee cada pregunta con amplitud de criterio, orientando las respuestas a la realidad en la que te encuentras (no la que desearías o crees que debería suceder).
    Ahora manos a la obra!

DELEGAR PASO 1

 

DELEGAR PASO 2

 

Cómo interpretar los resultados obtenidos en las Listas de Chequeo
Si el TOTAL de tus respuestas positivas (SÍ) no alcanza a 10, puedes considerar que el nivel de delegación en tu empresa, en tus colaboradores y en vos, es satisfactorio.

Si el TOTAL de tus respuestas positivas (SÍ) se da entre 10 y 20, analiza dónde está el problema (puede ser en cualquiera de las tres alternativas de análisis) Tienes que hacer algo porque tienes bastante trabajo para mejorar.

Si el TOTAL de tus respuestas positivas (SÍ) supera las 20, deberás plantearte muy seriamente qué está sucediendo con la delegación en la organización. Algo tienes que hacer porque seguro que están dilapidando potencia, perdiendo energía, y aumentando los costos, por todos los flancos.

Un vistazo al proceso de delegación efectiva
Poceso delegación efectiva

Este gráfico muestra el proceso de la delegación teniendo en cuenta:

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1. El Factor Tiempo. Debes elegir el momento oportuno para explicar la tarea (Objetivos claros y plazos)

2. La Comunicación de la Información. Si no informas a tu gente con transparencia, es posible que no sólo realicen mal lo que le encomiendes, sino que también se sentirán usados (sin información y haciendo las cosas sin poder participar)

3. El Objetivo a conseguir. Estos y sus parámetros de medición deberías acordarlos participativamente. Los métodos para alcanzarlos no deberían ser impuestos. Si existe por tu lado una experiencia al respecto puedes transmitirla y ponerla en consideración.

4. Los Plazos. Estos son un factor intrínseco dentro del objetivo a conseguir, de allí es que debes lograr un acuerdo mutuo y claro entre ambas partes. Algunas personas pecan de optimismo al calcular el tiempo y otras lo estiran por temor a no poder cumplirlo. En cada caso conviene que sepas con quién estás acordando para lograr tiempos razonables.

5. No perder el control preventivo de los avances. No hay que dejar de lado estos controles, menos si se trata de un proceso de largo alcance. Obviamente que debe hacerse sin interferir. Tu obligación será esperar hasta recibir los informes acordados y recién entonces intervenir. La clave está en establecer una periodicidad adecuada de informes de situación por parte del delegado.

6. Que la persona delegada sea quien tenga la potencialidad de lograr el objetivo. Esto significa que la persona en quien delegues se sienta apoyada, no solo en su potencialidad de lograr la meta delegada, sino también por las estrategias, el flujo de información necesaria y el correspondiente sistema de control.

7.
El delegado debe conocer la tolerancia al error. No al error contumaz, al de aquel que no prestó suficiente atención e interés al proceso, sino al que se produce por falta de experiencia o por tratarse de una misión novedosa.

Ojalá que este esquema te resulte útil para organizar tu propio estilo de delegar. Recuerda que la acción y el resultado de delegar no solo depende de quien delega, sino que también, del ámbito en que te encuentras (la organización) y las características de las personas que conforman tu equipo de trabajo (su potencial y capacidades).

 

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