Una de las partes con las que debe contar todo protocolo familiar, es un apartado donde se refleje cuál es la historia de la familia empresaria y los valores que la han respaldado a lo largo del tiempo.
Fruto del proceso de comunicación intrafamiliar, uno de los primeros aspectos que hay que consensuar son los valores de la familia y la misión de la empresa familiar. Una vez definidos, hay que definir los mecanismos de transmisión de esos valores a las generaciones venideras y al seno de la sociedad. Como comentamos en un post anterior, el lugar ideal para transmitir dichos valores es el seno de los órganos de gobierno de la familia, como la asamblea familiar y/o el consejo de familia.
Ser parte de un negocio familiar tiene grandes beneficios respecto a otros tipos de empresas. Algunas de ellas son:
Estas ventajas se podrían resumir en la cita de José Luis Simões, de Grupo Simões, recogida en el estudio “Los valores y la comunicación en la empresa familiar” de IESE. Dice “Los valores son como el viento, no se ven pero se sienten. Son los pilares más importantes de una organización. A nivel empresa, son entendidos, aceptados y compartidos, y entre los miembros de la familia, con más fuerza si cabe”.
Todo protocolo familiar debe tener una exposición de motivos donde se detallen los siguientes aspectos:
Al igual que no hay dos familias idénticas, no existirán empresas familiares sustentadas por los mismos valores. Cada empresa tendrá un sistema de valores únicos, que representa la esencia de la compañía y que se convierte en el elemento principal de su continuidad, sobre todo en momentos críticos, como los cambios generacionales.
Los principios son parte del ADN de la propia familia y se transmiten de forma natural, a través de la educación de los hijos, siendo la esencia que configura su identidad como familia. Y el mantenimiento de estos principios es crucial, porque son la base para el posterior desarrollo de valores. Según un estudio realizado por la Cátedra de Empresa Familiar del IESE hay cinco valores característicos de la mayoría de las empresas familiares. Estos son: el afán de superación constante, la cultura del esfuerzo, la capacidad de asumir riesgos, la sencillez y no al gasto superfluo.
Por tanto, son los valores los que definirán la cultura empresarial, siendo el nexo de unión entre todas los familiares y trabajadores ajenos a la familia de una empresa.
Fuente: https://empresax.com/blog/valores-empresa-familiar/