Por Eva Durán
Tener a quien recurrir cuando lo necesitamos, hoy en día es un elemento clave.
Para poder sobrevivir y avanzar en nuestro entorno socio-laboral y económico en el cual nos ha tocado vivir, donde las situaciones en nuestro trabajo o proyectos pueden tomar una nueva dirección de la forma más inesperada, es de gran ayuda tener fuentes fiables a las que recurrir.
El problema de muchas personas, es que, durante su trayectoria profesional se abandonan al día a día creyendo que lo tienen todo hecho.
Creen que su mundo de relaciones ya es suficiente hasta que ese mundo cae y ven que ya no tienen a quien recurrir… Lo más cercano se ha convertido en un mundo al que no pueden optar, tú sales y ellos se quedan y por desgracia, por muchos años que lleves en esa compañía, por muchas cosas que hayas compartido con ellos, en la mayoría de los casos se alejarán de ti por una cuestión de supervivencia y de un compromiso hacia la empresa mal entendido.
Es en ese momento en el que te das cuenta de que si no has cuidado tu mundo de relaciones (Networking), estás más solo que la una.
Esta realidad es triste pero por desgracia, más que habitual. De la concepción propia, teniendo en cuenta que nos coja en una edad avanzada, la situación puede llegar a ser traumática. En ese momento, en el que realizas una lista de contactos a quien recurrir, caes en la dura realidad de que aquellos contactos son pocos e insuficientes para remontar el vuelo.
Dicen que antes, los acuerdos o negocios, se sellaban en una comida o en un campo de golf. Ahora, gracias a las nuevas tecnologías, la información que tenemos y la posibilidad de conectar en las redes sociales, se ha abierto para poder optar a un mundo de posibilidades muchísimo más grande, amplio y de libre acceso.
Antes de dar el paso, se debe saber hacer, detrás hay una estrategia y un modo de hacer bien las cosas y eso pasa por conocer como construir este mundo de relaciones. Eligiendo y comprendiendo todos y cada uno de los diferentes canales. Por y para eso, se deben adquirir competencias digitales y comprender el funcionamiento de las redes para llevarlo al éxito.
¿Se trata de construir una Red de contactos?
¿Se trata de acudir a eventos a repartir y recoger tarjetas con el fin de conocer a personas que puedan ser de interés para nuestra profesión y/o negocio?
¿Se trata de coleccionar contactos en las distintas redes pensando que mejor tenerles localizados ’’por si algún día” les puedes necesitar?
Siento decirte en este momento que sí, pero no… El Networking es un acto de generosidad hacia terceros que necesita de un método basado en intereses comunes y centrado en el valor que tú o los demás pueden aportar a esa la relación.
Un mundo en el que te vas dando a conocer y en el que primero das para poder recibir después. Es un trabajo arduo, que no finaliza jamás si no cuidas tu red de relaciones no las tendrás cuando las necesites.
No se trata de ver qué provecho puedo sacar; sino de ver cómo podemos beneficiarnos de estar bien relacionados, una vez más esto es, un “toma y daca”.
Siempre he pensado que somos lo que somos también por quienes somos capaces de rodearnos y relacionarnos.
“Qué importante es saber elegir a tus compañeros de viaje, aquellos que te aportan, acompañan, ayudan y te abren puertas porque tú haces
exactamente lo mismo por ellos.
Creo firmemente en que existen formas idóneas para construir una verdadera y fructífera red de contactos, pero eso conlleva mostrar interés por los demás y conocerles, y no olvidar nunca que las Redes son las personas que hay detrás.
A medida de que vas creciendo en la Red, vas encontrando a personas en el camino que por afinidad personal y profesional llaman tu atención. Estas son las personas con las que vas a interactuar, establecer sinergias de futuro y compartir.
Irás sabiendo de ellas a diario y surgirán momentos únicos para conocerles que debes aprovechar.
Te enterarás que da una conferencia, que presenta su libro, que sencillamente asistirá a un evento al que tú tenías pensado ir… Es momento de comunicarte.
Tu generosidad y el estar presente en momentos importantes, harán que siempre se acuerde de que estuviste a su lado y de tu aprecio.
Ese es el momento idóneo para estrecharle la mano en el mundo real y saber que es alguien que puede contar contigo y tú con él, el momento de establecer una relación real, auténtica y de confianza que permanecerá en el tiempo.
Se promueven infinitos encuentros de tuiteros en la red, si te interesan, es bueno asistir porque en unas horas puedes “desvirtualizar” a un número elevado de personas.
“Esto no va de tomarse una cerveza con alguien, va de pensar en que quizás, en cuestión de tiempo os tomaréis otra para celebrar una futura colaboración o celebrar un éxito. Si tus contactos actuales son capaces de hacerte llegar a los contactos que quieres realizar en tu futuro es que lo estás haciendo bien.”
El Networking se ha cuidar todos los días (no sólo cuando necesito algo o me quedo sin trabajo) porque si no lo haces, los demás no entenderán que busques su hombro únicamente en momentos de crisis, si das, recibes. En caso contrario, tu única amiga será la indiferencia.
Construir una Red de contactos es un trabajo arduo en el tiempo, que precisa de disciplina y cuidados, nada pasa por casualidad, si das recibes, de lo contrario nunca será efectivo.
El Networking es una competencia profesional que debe crecer y avanzar. Profesionalmente se nos va a valorar más por ese mundo de conexiones,
Fuente: http://www.evacolladoduran.com/2017/08/claves-networking-efectivo-rrhh-marcapersonal/