Como innovadores, a veces queremos ir demasiado deprisa
Se nos va la cabeza
Porque nos exigen resultados para ayer
Y nos asalta el nerviosismo
Nos podemos a trabajar a todo gas
Porque así tenemos sensación de actividad, de que se mueven las cosas
Pero si vas deprisa, puede que te pases de frenada
Y cometas algunos errores de novato
Yo también los he cometido durante mis años como gestor de innovación y durante unos cuantos años con mis clientes en Innolandia.es
Así que voy a repasar contigo a pecho descubierto los errores más comunes y qué soluciones te propongo para evitarlos
Antes de que sea demasiado tarde y tu prestigio acabe por los suelos. O peor, en las listas del paro.
Yo soy el primero que peca de soberbia
De pensar que todo el mundo es un apasionado de la innovación, como yo
Y que van a dedicar horas y esfuerzos a sacar adelante el reto
Pues es un error
No a todo el mundo le gusta la innovación
No todo el mundo está preparado para innovar
No todo el mundo le gusta el riesgo
Así que tendrás que adaptarte al equipo que tienes y dedicar una parte importante del tiempo a sentar las bases de los equipos de innovación “novatos” para que funcionen.
Soluciones:
Si tu Comité de Dirección no le importa la innovación, mejor cambia de trabajo, antes de que sea demasiado tarde.
Te das cuenta que no hay un plan de innovación, más allá de responder a lo que piden los clientes o hacer proyectos cuando salen las subvenciones.
O que el Comité de Dirección o tu Director General sólo preguntar por cómo se van a financiar los proyectos.
Entonces lo habitual es que no se hable de innovación en las reuniones
Soluciones:
Necesitas conseguir que el Comité de Dirección tome la decisión estratégica de Optar por la innovación. Y eso se consigue:
Es muy fácil que tu equipo, el departamento de innovación (o I+D) funcione más o menos bien, pero es una caja cerrada.
Sólo se proponen ideas ahí.
Pero incluso si te has dado cuenta e intentas abrirte para proponer ideas desde fuera, aparece el síndrome de “No inventado aquí”.
Quizás hayas escuchado esta frase asesina de la innovación: “qué sabrás tú de esto”.
Y piensas: Para esto, seguimos haciéndolo nosotros sólos.
Pues es un error, porque así no construirás una empresa innovadora, sino un buen departamento innovador.
Soluciones:
Cuando das el paso de abrir la innovación, te puedes sentir satisfech@, pero realmente no has conseguido nada todavía.
Te puedes encontrar con algunas de estas situaciones
Necesitas establecer un marco de trabajo para que las personas puedan innovar.
Porque la innovación no surge de la nada.
Solución:
Cualquier equipo de innovación que definas arranca con un reto, sobre el que trabajar.
Un problema a solucionar, en el que aplicar una metodología
Exploras nuevas alternativas radicales, investigas tecnologías y a los usuarios
Empiezas a validar la solución
Pero es muy posible que en un momento determinado, llegue un directivo cambiando las prioridades 180 grados
El trabajo realizado hasta entonces, apenas si te sirve
Y el equipo, empezará a bajar los brazos. Los fuegos del día a día os persiguen y el volantazo hace que el proyecto pierda credibilidad
“Total, ya estamos como siempre, preocupados por el día a día”
No es una historia inventada: me ha pasado con varios clientes grandes.
Solución:
Una vez que has conseguido un equipo de innovadores tienes que protegerlo del infierno del día a día.
¿Cuántas reuniones has cambiado o cancelado en los últimos tres meses?
Unas cuantas verdad?
El problema la mayoría de las veces, son las “bombas” que aparecen en el camino
Las presiones del corto plazo, los imprevistos…
Empezamos a no hacer las reuniones de seguimiento y los proyectos se retrasan.
Pero no pasa nada para los jefes.
Entonces, las personas de los equipos de innovación ven los hechos (la falta de prioridad en la innovación, que “no nadie me dice nada” si no voy a la reunión) y no las palabras (la innovación es clave en nuestro negocio)
Y aplican lo que ven.
El corto plazo. Y la innovación….. pues cuando tengamos tiempo
Es decir, nunca.
Solución:
Es muy típico que a los buenos profesionales los sobrecargamos de trabajo
Lo haces bien, superas las expectativas y la recompensa es….
Más trabajo!!!
Es el síndrome de gestor de marrones
El esfuerzo de los equipos de innovación tiene que recompensarse, porque se van a caer muchas veces
No vale el café para todos
Porque las personas que participan en equipos de innovación están tomando riesgos, están aprendiendo sobre la marcha, están poniendo mucha energía y emociones en innovar
El desgaste es brutal.
Y eso necesita recompensarse
Solución:
Yo he cometido este error en el lanzamiento del curso avanzado de herramientas para innovadores
Y lo he visto en casi todos los proyectos que he trabajado con clientes
Realizamos un experimento, mostramos un prototipo muy básico a clientes potenciales y nos dicen que sí, que les gusta, e incluso que lo comprarían
Y entonces vamos al Comité de Dirección y le decimos que el nuevo producto va a ser la bomba. Estamos inflando el globo lleno de agua.
Lanzamos el producto o servicio y……….
……….
……….
Nada
Ni una venta
Bueno, mínimas….
Hemos confundido el indicador para aprobar una idea!!
El Comité de Dirección te pide explicaciones que no sabes dar.
La única opinión válida sobre un producto o servicio innovador se da con la tarjeta de crédito.
Innovar no es sólo tener ideas sino tener éxito comercial.
Soluciones:
Después de hacer proyectos piloto que demuestren en tu empresa (o cliente) que se pueden aplicar las herramientas, tienes que dar el salto
Empezar a gestionar la innovación.
Y el elemento crítico que necesitas es un presupuesto
Porque si no tienes un presupuesto asignado te encontrarás en alguna de estas dos situaciones:
Y así no conseguirás nunca una empresa innovadora
Soluciones:
Para mí no hay nada que haga más daño a la innovación que las normas de certificación
Porque, seamos sinceros, lo que hay detrás es un inmenso negocio
Certificaciones, auditorías, auditorías de control, seguimiento…..
Tienes un certificación de innovación pero sientes que el sistema no funciona bien
Tus proyectos se alaaaargan y eternizan
Tienes proyectos zombie: están ahí, registrados, pero no está claro para qué
La tasa de éxito de los proyectos es baja
Necesitas un sistema, sí. Pero las certificaciones no ayudan a generar una cultura innovadora.
Así de duro
Solución:
Estos errores frecuentes tienen consecuencias. Y algunas pueden llegar a ser dramáticas
Innovar sin cabeza puede llevar a tirar el dinero a la basura, sin darte cuenta
Contratos equivocados con centros de conocimiento o consultoras, proyectos mal plateados que te cuestan el doble….
Seguro que sabes de lo que te estoy hablando
Y no estamos para desperdiciar recursos
Innovar sí. Pero de forma eficiente.
A veces nos obsesionamos por el proceso y olvidamos el resultado
Lo importante de la innovación es convertir las ideas en nuevos productos / servicios / procesos que generen valor
Y se traduzcan en dinero en la caja
El resto son medios
Si tenemos procesos burocráticos, lentos o nos cuesta tomar decisiones
Quizás te ha pasado a ti
Esperamos a que salga la subvención de turno para innovar
O a tener el producto perfecto
Vamos tarde
Y cualquier emprendedor nuevo o la competencia, nos adelantará sin mirar atrás
Recuerda: 100 millones de mocosos en garajes y aceleradoras dispuestos a mandar a tu empresa al cementerio
Que levante la mano el que no se ha dado de golpes contra la pared para innovar
Sin embargo ser gestor de la innovación mola
A mí me encanta
Pero requiere de mucho esfuerzo, perseverancia, resilencia.
Porque te tocará estar todo el día empujando, para conseguir que las cosas funcionen.
Superar la resistencia al cambio de tus jefes, que les importa un pepino la innovación
Que las personas propongan ideas y participen en proyectos, para integrar la innovación en el ADN de la empresa
Y luego está el riesgo de la innovación.
Empezar a innovar no quiere decir que vaya a salir todo a la primera.
De hecho, muchas cosas van a salir mal.
Tendrás que levantarte y seguir.
Y eso es bueno. Es parte del camino.
Fuente: https://innolandia.es/los-10-errores-mas-comunes-de-los-innovadores