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¿Errores que cometemos al elaborar un presupuesto?

Por Matias Riquelme

Nuestro amigo Matías Riquelme nos envía este curioso trabajo que poco o nada tiene que ver con los temas que nos ocupan, pero como la gente de cultura también tenemos que hacer presupuestos hemos accedido a publicarlo. En este artículo Matías da a conocer los principales errores al momento de trabajar en un presupuesto.

¿Qué es un presupuesto?

El presupuesto es un plan integrador, coordinador y controlador que expresa en términos financieros las operaciones y recursos que formaran parte de las actividades de una empresa en un periodo explícito, con el fin de lograr determinados objetivos pautados por la alta gerencia.

Para que quede claro detallamos cada elemento del concepto:

  • Plan: porque expresa lo que la administración espera que se lleve a cabo.
  • Integrador: tiene en cuenta las diferentes áreas de la empresa y la forma en que contribuyen cada una de ellas con el logro de los objetivos.
  • Coordinador: Regula los planes para cada departamento en conjunto.
  • Controlador: Ya que permite comparar los resultados obtenidos en la realidad con lo presupuestado y llevar el control de su apego al mismo.
  • Términos financieros: Pues se expresa en la moneda en curso en el país de origen.
  • Operaciones: Se detallan los gastos e ingresos con el objetivo primordial de determinar la ganancia que se pretende obtener.
  • Recursos: Se planea en base a los recursos disponibles y destinados para realizar los planes de operación.

Los errores más comunes al elaborar un presupuesto

Los primeros errores que enumeraremos en este artículo se basan en la realización propiamente dicha del presupuesto y pueden ser:

1-    Errores de cálculo en las ventas

Este tipo de error sucede cuando se usa información histórica de las ventas y no se tener en cuenta los objetivos a cumplir, también cuando se calcula la misma y sin tener presente el factor geográfico, tipo de producto o clientes.

Por otro lado, ocurre este error al no relacionar la cifra de las ventas prevista con el resto del presupuesto, es decir, gastos comerciales, producción, estructura, inversiones, etc.

2-    No determinar correctamente el coste de las ventas

En este caso sucede igual que en el anterior, se abusa de la información histórica, Nunca se debe calcular el coste de ventas usando solo como base los datos de ejercicios anteriores, los gastos incurridos pueden variar y el error sería fatal para las finanzas y éxito del proyecto.

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3-    Mala previsión de los gastos generales

Estos gastos, aunque no se pueden incorporar en los costes de los productos, deben considerarse ya que son necesarios para la empresa en el apoyo de su actividad y su carácter es fijo.

El error en este punto sucede cuando se calculan dichos gastos en función de un porcentaje de las ventas.

4-    Calcular fraccionando en 12 períodos

Un error muy común suponer unas ventas totales para el año y dividirlas entre doce. Las ventas varían por estacionalidad, también se debe considerar rebajas de temporada, liquidación de stocks, y la entrada de nuevos productos.

5-    Los objetivos deben fijarse señalando los responsables de su cumplimiento

Es importante tener señalados los responsables directos de alcanzar los logros y metas, para que el análisis y valoración de resultados permita ubicar problemas y conseguir mejoras.

El equipo de trabajo debe asumir responsabilidades a partir del hecho de verificación del cumplimiento de los objetivos.

6-    Trazar resultados inalcanzables

Este error suele descompensar el presupuesto, trazar unos objetivos muy altos e inalcanzables, por un lado, lleva a continuas modificaciones durante el ejercicio y por el otro le resta credibilidad.

7-    Errores de base

A la hora de encontrar errores cometidos en la realización de un presupuesto, además de los que acabamos de mencionar suelen encontrarse errores de base, es decir, que desde que se plantean llevan cargado fallas que afectan el mismo, por ejemplo:

  • Ignorar los factores culturales: En un negocio de venta de siempre se debe considerar los factores culturales. Es muy importante estar al tanto de las características socio-culturales del mercado objetivo y considerar si pueden representar algún riesgo respecto a las expectativas de venta.
  • Desconocer los riesgos: Siempre existirá algún riesgo de que no sucedan las acciones tal como se han planificado. Por lo que siempre se debe ser previsivo, considerar y estar preparado para posibles pormenores.
  • Confundir el presupuesto con un plan de negocio: Elaborar presupuestos es una parte primordial en el desarrollo de un plan de negocios. Pesar de ello, un plan de negocio involucra mucho más que eso, amerita analizar objetivos, diseñar estrategias y coordinar recursos, entre otras cosas.
  • No repartir responsabilidades: El presupuesto debe ser global, sin embargo, las diferentes partidas deben estar asignadas a los responsables de las diferentes áreas, de manera que exista cada uno ejerza un control separado de estas partidas además del control global ejercido por la alta gerencia.
  • Rigidez presupuestaria: El presupuesto debe cerrarse y presentarse antes de ejecutar un proyecto, sin embargo, hay ocasiones que ameritan alguna modificación en determinado aspecto para adecuar el mismo a nuevas condiciones sin fallar a los objetivos marcados. El presupuesto debe ser lo suficientemente flexible para detectar posibles necesidades, adaptarse a cambios y afrontar esas nuevas necesidades.
  • Ausencia de seguimiento: El trabajo no concluye una vez elaborado y presentado el presupuesto. Paradójicamente el seguimiento es una fase continua que abarca todo el proceso, siendo imprescindible para conocer si hay cumplimiento de lo pactado o si por el contrario existen desviaciones, bien sea respecto a los gastos, ingresos o con la consecución de los objetivos.
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Vale la pena señalar que la elaboración del presupuesto no depende únicamente de los objetivos y de la operativa de la empresa, pues no todas ellas funcionan de la misma manera, evitar errores presupuestarios es clave para todas ellas, ya que permite mayor seguridad a la rentabilidad económica de la empresa y disminuye los riesgos.

Tal como dice su nombre, es pre-suponer el elemento finanzas y economía, teniendo como base cuáles serán las actividades a realizar. La importancia del mismo radica entonces en realizar una proyección seria y racional de los movimientos económicos y financieros de la empresa. Así, sin un presupuesto adecuado se podrían generar más gastos de lo necesario o incluso no habría control de las ganancias, ambos totalmente perjudiciales para el bienestar de la empresa.

Fuente: https://critica.cl/otros/errores-cometemos-al-elaborar-un-presupuesto

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