Un espacio para aprender que no es necesario ser una empresa grande para ser una Gran Empresa
Home » Calidad de Vida » El obstáculo es el camino

El obstáculo es el camino

Por Javier Oriondo

Una parte importante de la calidad de nuestra vida es directamente proporcional a la capacidad de gestionar la incertidumbre. No es la mejor compañera de viaje, ni la más apetecible, pero cada cierto tiempo -y en muchas más ocasiones de las deseadas- vuelve aparecer a nuestro lado, nos acompaña por mucho que no nos guste.

Como la cadena alrededor de los tobillos de un preso, la incertidumbre se convierte en esa pesado lastre que nos frena y nos impide avanzar libres. Es algo que  provoca preocupaciones, ansiedades y miedos, nos roba la energía, la esperanza y hasta el presente, a base de agoreras predicciones sobre el futuro.          

Lo curioso es que cuanta más seguridad y certeza necesitemos, más tiempo se quedará con nosotros y más sufriremos, porque la obsesión por la seguridad y el control provoca justo el efecto contrario, de hecho aumenta la inseguridad en el presente.

1. No podemos vivir huyendo de la vida

Pero si hay algo que uno va aprendiendo con los años es que no podemos vivir huyendo de la vida, ya que la huída nos encoge el corazón, reduce el coraje y la capacidad de reacción, debilita nuestros músculos emocionales; nuestra fuerza de voluntad se agrieta, nuestra anémica identidad sufre y lo que necesitamos es una buena dosis de coraje, sin embargo no hay pastillas para el coraje y la determinación.

Eso que nos hace dudar, eso que tememos, ese obstáculo que no queremos ver y que procuramos evitar, ese es precisamente el camino que debemos seguir, porque el obstáculo es el camino. Ese «problema» que nos llena de tensión, ese el reto que la vida  pone en nuestro camino para poder superarnos.

En ese obstáculo está escondida la puerta de nuestra libertad, esa que nos libera del lastre de la duda y la preocupación, es la puerta del coraje y la determinación para enfrentarnos a nuestro destino. 

Huir es morir en vida, porque cada uno de nosotros sabemos cuando estamos escondiéndonos o esperando que la tormenta pase, esperando a que algo pase, pero lo único que pasa es el tiempo, que es la materia prima de la cual está construida la vida, y si perdemos ese preciado tiempo, se nos escapa la vida esperando a vivir.

Lectura relacionada  5 principios para cambiar tu vida en los próximos 5 años

Aunque también sabemos -y sobre todo sentimos- cuándo estamos siendo valientes y enfrentándonos a nuestros demonios, cuando damos un paso al frente a pesar de los miedos, cuando nos atrevemos y somos fieles a nuestro destino. 

2. Cuando no estamos dispuestos a fracasar no podemos triunfar

Si no estás dispuesto a equivocarte jamás podrás progresar. El paso previo de la maestría es la ignorancia, estar dispuestos a reconocerla, a reconocer que no sabemos suficiente, que nos vamos a equivocar, que tenemos que aprender y mejorar. Yo no soy, ni jamás seré un experto en nada, seré siempre un eterno estudiante. Un experto es alguien que proclama Yo ya sé y desde ahí es difícil aprender.

Así que hazlo mal si es necesario, pero hazlo. Empieza, lánzate, equivócate, cáete, pero cáete hacia delante, ya irás mejorando. No hay otro camino, no hay garantías, no existe esa seguridad que nuestro cerebro quiere creer que existe y, a veces, busca desesperadamente.

No es cuestión de no tener miedos ni dudas, que estarán ahí, sino de encontrar un porqué tan grande, una poderosa razón que nos impregne de coraje y determinación. Un sueño, un propósito que te llene energía y un compromiso ante ti mismo más grande que todos los miedos.

Hay mucho escrito y se sabe que los grandes arrepentimientos de la vida no son por lo que hemos hecho, sino por lo que no hicimos. Uno de los grandes arrepentimientos al final de una vida es el tiempo perdido, la energía desperdiciada y el sufrimiento inútil por el exceso de preocupación sobre el futuro.

► Si pero ¿y si me equivoco…?

¿Cuál es la consecuencia del error? Experiencia y aprendizaje. Y sigues avanzando, sigues cayéndote, sigues aprendiendo, sigues acercándote a tu objetivo, te haces cada vez más fuerte en todos los sentidos. 

Lo cierto es que si te quedas donde estás, si no tomas decisiones, si te paras, no te quedas dónde estás porque el mundo sigue avanzando; si te quedas donde estás, retrocedes y te caes. Entonces te preguntarás qué ha pasado. La respuesta es simple: dejaste de caminar, dejaste de aprender, de atreverte, de vivir.  https://www.youtube.com/embed/Gfi_s7Ba40k?start=26&feature=oembed&enablejsapi=1&origin=https%3A%2F%2Fjavieririondo.es

Decide que el obstáculo es el camino, avanza hacia eso que temes, porque entonces comenzará la transformación, esa en la cual creces y floreces desde el interior, es cuando sientes que estás atreviéndote, siendo fiel a tu destino, cuando sientes que la trayectoria es ascendente, de progreso, que te diriges hacia aquello que puedes llegar a ser. Es entonces que la vida tiene más sentido, es cuando asumimos la responsabilidad personal de nuestra vida.

Lectura relacionada  Si yo tuviera mi vida para vivirla de nuevo

Nos sentimos como vivimos, nos sentimos como nos comportamos. La pregunta es ¿cómo nos comportamos? ¿Nos comportamos con determinación, como víctimas o lo hacemos con coraje y valentía ante la vida?

La respuesta no depende de los demás, no depende del mundo, la respuesta y esa responsabilidad recae sobre cada uno de nosotros. 

Fuente: https://javieririondo.es/2020/07/10/el-obstaculo-es-el-camino/

Si quieres ver más posts de la misma categoría, haz click aqui:


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.