Por: Dafne Navarro Miranda
Caray, el tiempo pasó tan rápido. Superamos los doce meses desde que inició todo esto y ya vamos para el año de confinamiento en México.
Y no sé tú, pero ante esta situación, en ocasiones me siento como si volviera a un lugar donde ya había estado, pero con experiencia bajo el brazo. Me recordé viendo la película “El día de la marmota” (1993).
Así que, ¿por qué actuaría igual si sé que me reconozco diferente ante la situación? Tú y yo ahora tenemos un conocimiento que podemos aprovechar a nuestro favor y no perder el foco de lo que en verdad importa.
Parece una locura, pero muchas veces a pesar de ver una misma situación de manera diferente, por costumbre, comodidad, por mantener una posición, seguimos actuando igual. ¿Te ha pasado?
Cuesta aceptar la equivocación o dejar atrás lo que pasó, en vez de asumir un comportamiento humilde, abierto, de aprendizaje. También pasa que en este estancamiento con el pasado se deja de lado la oportunidad de estar sintonizados con el presente, que es el único momento real para realizar un cambio. El que tú quieras.
Y el cambio no necesita que lo entiendas, requiere que lo adoptes, que lo integres y lo vivas. El cambio, ese que buscas o eliges, te permite conectar con la verdad de tus posibilidades, actualizarte y mantenerte enfocado.
Entonces si ya reconociste la situación, concebiste la experiencia y adoptaste el cambio, es momento de pasar del entendimiento a la acción.
Imagen: Tikhonova | Getty Images
Enfócate en:
Mantén la esperanza y sigue luchando por tus sueños, sigue presente, acepta la realidad, recuerda que es algo transitorio que te está exigiendo un esfuerzo adicional para adaptarte y sobrevivir.
Compórtate de forma positiva, confía en tu capacidad de resiliencia. Recuerda aquellas dificultades que ya superaste, ponle creatividad cuando debas resolver un desafío, motiva aquellas cosas que te ayuden a mejorar tu calidad de vida actual (a mí por ejemplo, me gusta bailar u hornear pan los findes de semana).
Es usual iniciar los primeros meses con expectativas, entusiasmo y el compromiso de cumplir los propósitos planteados, sin duda alguna este año fue distinto. Sin embargo, es importante tomar en cuenta que como en toda crisis, lo que estás viviendo es transitorio, en algún momento pasará.
Fuente https://www.entrepreneur.com/article/367722