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¿Cómo empiezo a mejorar mi vida? Una teoría comprobada que no requiere grandes cambios

Por Tania Sanz

¿Sientes que tu vida necesita mejorar? ¿Tienes la sensación de que es importante pulir algunos hábitos en tu rutina?…

Bueno, no quiero decepcionarte pero, este definitivamente no es un artículo con «10 cosas que ayudan a cambiar tu vida» o «5 consejos que hacen de tu vida mejor».

Creo que nuestras vidas son demasiado complejas, por lo tanto empezar a mejorarlas requiere de algo más definido. Pero, también es verdad que no tenemos tiempo para probar distintas estrategias en cada área de nuestra rutina o intentar tomar acción con grandes cambios.

Por eso, no te prometo un cambio mágico y repentino después de leer este artículo, pero quizás cuando llegues al punto final, tendrás una estrategia concreta que se convierta en el punto de partida para empezar a mejorar tu vida paso a paso.

 «Somos ese quimérico museo de formas inconstantes, ese montón de espejos rotos» . -Jorge Luis Borges

Tengo un amigo que es un poco caótico.

Su casa, su armario, su escritorio y su rutina en general están constantemente en desorden, pero es muy buena persona.

Hace poco necesitaba ir a un compromiso fuera de la ciudad y, por supuesto, no dudó en prestarme su auto.

Puedes imaginarte que el auto también era un caos: estaba un poco sucio, había botellas de agua vacías, envolturas, ropa olvidada y hasta un paquete en el maletero que ha olvidado llevar al correo.

El punto de esta pequeña anécdota es que algo curioso sucedió:

Cuando devolví el auto me di cuenta de que los amigos que habían viajado conmigo, dejaron basura debajo de los asientos.

Y pensarás pues ¡qué amigos tan cochinos! Pero, te sorprenderá saber que el comportamiento no fue culpa de ellos, en realidad, fue culpa del ambiente caótico que se respiraba en el auto.

Me explico mejor: el auto no está sucio como consecuencia de dejar basura, sino al revés: la gente deja basura porque el auto ya está sucio (una basura más no hace la diferencia)

Te doy un ejemplo: cuando terminas de limpiar tu cocina, es mucho más probable que los próximos días sigas limpiando hasta la más diminuta mancha para así conservarla reluciente ¿verdad?

Pero, si la cocina ya está desordenada, es mucho más probable que no te importe dejar esa taza sucia por ahí ¡qué más da!

Entonces, ¿qué significa todo esto? y ¿qué tiene que ver esto con mejorar tu vida?…

Bueno, sigue leyendo para enterarte…

La teoría de las ventanas rotas

Desde los años ochenta, las ciudades de todo el mundo han utilizado está teoría para combatir el crimen y mejorar la vigilancia policial.

Esta teoría ha sido prácticamente la biblia de la criminología. Los autores proponen que el crimen en las ciudades comienzan con el desorden1:

Primero, se abandona una propiedad, crecen las malas hierbas y se rompe una ventana. Los vándalos rompen más ventanas.

La basura se acumula. Las familias se mudan.

Los adolescentes se reúnen frente a la tienda de la esquina para beber. El comerciante les pide que se muevan; y se niegan. Se producen peleas.

Comienza la criminalidad.

Esto quiere decir que, aquellas zonas de la ciudad con más ventanas rotas, edificios abandonados, grafitis, basura y desorden, tienden a tener las cifras más altas de criminalidad.

Si logramos detener estos delitos menores, disminuye la criminalidad.

Desde mi punto de vista esto significa que, el crimen comienza a aparecer en forma de pequeños detalles casi imperceptibles, desordenes diminutos que se van acumulando hasta formar una bola de caos lo suficientemente grande para afectar la vida de las personas.

Una buena estrategia para prevenir el vandalismo, dicen los autores, es arreglar los problemas cuando aún son pequeños para evitar que se intensifiquen, por ejemplo: reparar ventanas, recoger la basura, limpiar las calles.

Como bien lo dijo el ex jefe de policía de Los Ángeles y Nueva York, William J. Bratton: “si cuidas de las pequeñas cosas, entonces puedes evitar muchas de las grandes»

Hace poco se realizó una potente investigación con una perspectiva nueva y mucho más acertada sobre esta teoría de las ventanas rotas, los resultados muestran una disminución del 35% de la violencia con armas de fuego en aquellas zonas de la ciudad en las que los “terrenos abandonados” se remodelaban .

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Todo lo anterior, también puede aplicarse en tu vida:

Los comportamientos y hábitos no saludables, comienzan a aparecer en forma de pequeñas decisiones casi imperceptibles, acciones diminutas que se van acumulando hasta afectar tu vida de forma notoria.

Y al revés, enfocarte en hacer cambios diminutos en tu ambiente, te motiva a tomar pequeñas acciones saludables que se van  acumulando hasta tener un gran impacto positivo en tu vida.

A menudo, pensamos que para empezar a mejorar nuestra vida, necesitamos tomar acciones drásticas, o hacer un tremendo esfuerzo para obligarnos a hacer lo correcto.

Pero, olvidamos la importancia del entorno en nuestras acciones.

Cuando transformas tu entorno para mejorar, las buenas decisiones son prácticamente inevitables.

Tu comportamiento está influenciado por tu entorno

Por favor, mira a tu alrededor.

Todo tu entorno está configurado para determinar cómo debes actuar.

Los objetos, señales y hasta personas, nos sirven como guías de referencia sobre cómo debemos actuar y responder.

Las señales ambientales son los objetos en nuestro entorno que desencadenan ciertos pensamientos y deseos, lo que hace que nos comportemos de cierta forma.

Por ejemplo:

  • Tienes muchas pestañas abiertas en el navegador de tu computadora, lo que te hace procrastinar empezar tu trabajo.
  • Cuando los platos que usas para comer están sucios, tiendes a pedir comida no saludable a domicilio
  • Si tu ropa deportiva está en el fondo del armario, es mucho menos probable salir a caminar (como te lo habías propuesto)
  • Cuando miras las notificaciones de Instagram, hace más probable que comiences el espiral de comparaciones y autocrítica

Si quieres toma el control de tu vida, primero debes tomar el control del espacio que te rodea.

El ambiente influye en tus pequeñas decisiones y, si cuidas de tus pequeñas decisiones el resultado acumulado es bastante notorio.

Todo lo anterior quiere decir que el ambiente es el mayor desencadenante de nuestros hábitos

Tu misión consiste en encontrar todas esas cosas en tu entorno personal que habilita tus viejos hábitos y luego rediseñarlo para que sea compatible con nuevos y mejores hábitos.

En la teoría de las ventanas rotas para prevenir la criminalidad, se logra básicamente porque están influyendo dos estrategias:

Primero evitar que se respire un ambiente descuidado (porque promueve el vandalismo) y segundo, diseñar un espacio que aliente un buen comportamiento.

Esa es mi propuesta para ti:

Hacer cambios muy pequeñitos en tu ambiente (casi imperceptibles) que no requieran de una gran esfuerzo de tu parte, pero que influyan en tus decisiones para mejorar tus hábitos.

La pregunta es ¿cómo y por dónde empiezo?…

¿Cómo y por dónde empiezo a mejorar mi vida?

Realmente no hay una sola forma de poner en práctica el principio de “cambiar tu ambiente para empezar a mejorar las pequeñas cosas”.

Primero es importante identificar en qué zona de tu vida aparecen estás ventanas rotas, es decir ¿que área de tu vida necesita mejorar? ¿en dónde empezamos nuestra remodelación?

En este punto es normal pensar: ¡todas! ¡necesito cambiar todo!

Pero, si lo piensas nuevamente y te detienes a analizarlo, todos tenemos ciertas “zonas de conflicto”, todos tenemos áreas con más ventanas rotas que otras.

Por ejemplo, es probable que consideres urgente dormir mejor, tal vez se trata de tu alimentación, de fortalecer tu concentración en el trabajo o de aprender a manejar mejor el estrés.

Así que como primer paso, identifica tu zona de conflicto.

No es tan difícil, a continuación encuentras algunos pasos simples que puedes tomar para empezar.

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1.- Divide tu vida en 4 áreas:

Ya que tenemos como analogía la teoría de las ventanas rotas, entonces, por qué no dividir tu vida en 4 áreas principales.

Te será más fácil si dibujas una ventana cuadrada, con cuatro divisiones.

Cada división representa una área de tu vida:

  • Salud: su estado general de salud alimentación, ejercicio.
  • Productividad y finanzas: tu situación de dinero, tu trabajo.
  • Relaciones personales : relaciones con amigos, familiares, personas significativas, etc.
  • Desarrollo personal: Mejorar tu autoestima, confianza…

2.-  ¿Qué parte de la ventana está más rota?

En cada cuadrante de esa ventana, escribe un número para calificar qué tan bien o mal consideras esa área en tu vida.

Califica cada área en una escala del 0 al 5…

(El 5 es la calificación más alta y quiere decir que esa área en tu vida está excelente y, al revés)

Quizás todas las áreas tiene menos de 5 o, tal vez, solo hay dos áreas en especial que tiene la calificación más baja, lo que significa que ahí existen hábitos perjudiciales.

No pasa nada. No es momento de analizar el por qué y tampoco es válido culparse o victimizarse.

Por ahora, solo encuentra el número más bajo: ¿qué área de tu vida necesita una remodelación con más urgencia?

Por ejemplo, la mía es definitivamente mi productividad.

Necesito aprender a manejar el estrés, generalmente me cuesta hacer pausas en el trabajo y tengo el hábito de empujarme a hacer más de lo necesario. Cuando termina el día y no logré completar todo lo que me propuse, siento una leve frustración, también me salto mi tiempo libre, lo cual lo hace todo peor.

Por eso, creo que esa área de mi vida es la zona más conflictiva ¿cuál es la tuya?…

3.- En la parte más rota: ¿qué pequeño cambio podrías hacer ahora en tu ambiente?

En este punto, solo tienes definir máximo 2 cosas pequeñas que podrías cambiar en tu ambiente para mejorar ese número (solamente en esa área con la calificación más baja).

La regla de oro es mantener eso que aliente los buenos hábitos cerca y de forma conveniente. Y al revés, mantener distante o más inaccesible eso que promueva los malos hábitos en tu vida.

Tengo dos formas de lograrlo:

– Construye barreras, cercas o remueve los recordatorios para desalentar los malos hábitos

Por supuesto, las cercas de las que estamos hablando no son barreras de púas; son simplemente los límites que creas en tu vida.

De esta forma tener hábitos perjudícales o comportamientos que afectan tu vida no serán la decisión predeterminada, sino que estarás creando cierta distancia para retomar el control y decidir mejor.

Aquí te dejo algunos ejemplos:

  • Esconder (o regalar) la comida no saludable de tu nevera y refrigerador
  • No llevar dinero al trabajo para no comprar nada en la cafetería
  • Esconder el control remoto de la televisión, para evitar tumbarme en el sofá
  • Dejar tu cargador del móvil muy lejos del lugar en dónde duermes
  • Cerrar sesión en todas las páginas de distracción
  • Apaga todas las notificaciones del móvil
  • Esconde las tarjetas de crédito en casa
  • Apaga tu móvil el viernes, para evitar esa innecesaria salida de fiesta
  • Si perjudica tu autoestima, date de baja en Instagram

Si no se te ocurre absolutamente nada para remover los recordatorios en tu ambiente, entonces, puedes hacer lo siguiente:

  1. Analiza tu rutina e identifica los comportamientos o hábitos no saludables
  2. Identifica ¿qué te recuerda o qué te impulsa a caer en ese comportamiento? ¿Cuál es la pista?. Puede ser un objeto, un lugar, un momento del día, una persona, etc.
  3. ¿Cómo podrías eliminar ese recordatorio o distanciarlo de tu ambiente?

La siguiente parte también es muy fácil…

– Diseña tu espacio para que influya en el comportamiento que quieres

Las señales ambientales son los objetos en nuestro entorno que desencadenan ciertos pensamientos y deseos, lo que hace que nos comportemos de cierta manera.

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Si logramos cambiar aunque sea muy poco este ambiente, las actividades saludables no solo serán intencionales sino más predeterminadas.

Tener una mejor opción al alcance hace que se convierta en la opción por default.

Fíjate en estas ideas:

  • Tener fruta a la vista y ya lavada para llevar a la oficina
  • Mantener la cocina limpia para  que sea más fácil cocinar
  • Poner mi ropa deportiva en el pasillo para tener que verla en la mañana
  • Llevar mis zapatillas deportivas en el bolso para caminar de regreso a casa después del trabajo
  • Tener un libro cerca de la cama, para leer en vez de estar en el móvil
  • Hacer la cama por la mañana para que sea más atractivo ir a dormir
  • Programar alarmas para hacer pausas mientras trabajas
  • Pega una nota en tu billetera que recuerde tus metas financieras
  • Programa un recordatorio para pagar los recibos mensuales
  • Programa una canción como alarma que te ponga de buen humor
  • Tener una silla para escribir concentrado y otra silla para estar en Facebook

Si no se te ocurre absolutamente nada para modificar en tu ambiente, entonces, puedes hacer lo siguiente:

  1.  ¿Qué hábitos saludables hacen falta en tu rutina?, ¿qué haría una persona que tiene esa área de su vida en orden?
  2. ¿Cómo podrías hacer mucho más fácil adoptar ese hábito? ¿qué tendría que estar presente en tu alrededor para que el comportamiento saludable fuese obvio? ¿Qué te ayudaría a tomar la decisión correcta?

Esto puede ayudarte a escribir una lluvia de ideas y elegir lo que más se ajuste a tu vida.

¿Por qué funciona la estrategia de las ventanas rotas para mejorar tu vida?

Los cambios que hacemos pueden parecer insignificantes al principio, pero, estás mejoras diminutas se acumulan con el tiempo hasta lograr grandes resultados.

La teoría de las ventanas rotas funciona para mejorar tu vida…

Aquí te dejo más ventajas de la estrategia de «las ventanas rotas» para empezar a mejorar tu vida:

  • No sientes agobio por todo lo que necesitas mejorar en tu rutina diaria
  • Te ayuda a identificar y enfocarte primero, en una área de tu vida que necesitas remodelar
  • Es más fácil mantener sobre el tiempo un pequeño cambio, en vez de hacerlo todo al mismo tiempo
  • Los pequeños cambios en tu entorno, se acumulan hasta lograr grandes resultados sostenibles
  • Hacer lo correcto, es mucho más fácil y no tienes que apoyarte solo en tu fuerza de voluntad
  • Cuando tienes un hábito saludable es más probable que la racha saludable se extienda en más áreas
  • Poco a poco puedes ir haciendo más cambios increméntales en tu ambiente para tener mejores hábitos

Todos tenemos ventanas rotas en nuestra vida, por eso lo importante, es tomar acción para empezar a remodelar poco a poco.

Ahora me encantaría leerte en los comentarios de aquí abajo.

Cuéntame: ¿qué parte de tu rutina empezarás a remodelar? ¿cómo lograras eliminar las pistas? ¿qué pequeños cambios en tu ambiente estarás haciendo?

Fuente: https://habitualmente.com/como-empiezo-a-mejorar-mi-vida/

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