Por Marc Vigilante
Miedo de lo que hay en nuestro interior, miedo de lo que hay en el interior de los demás, miedo de lo que hay fuera. Nos asustan los cambios. Nos asusta quedarnos igual. Nos aterroriza cualquier cosa fuera de lo corriente, o un cambio en la rutina. Todo el mundo quiere ser distinto, pero ésa es la mayor amenazaJohn Katzenbach
No hay nada peor que el miedo al cambio para que las oportunidades de crecimiento y aprendizaje pasen de largo. El cambio es parte fundamental de nuestras vidas y renunciar a él es renunciar a las oportunidades de desarrollo que se generan a través del mismo.
A todos, en general, nos gusta tener nuestra vida bajo control y sin excesivos sobresaltos y, en muchas ocasiones, si es predecible mejor que mejor. Los entornos y situaciones nuevas nos obligan a utilizar estrategias y modelos desconocidos y poco transitados dando paso a nuestros miedos e inseguridades. Son entornos en los que estamos obligados a adquirir nuevos aprendizajes y romper con hábitos muy arraigados y difíciles de transformar.
Todos sabemos que el cambio genera ansiedad y preocupación ya que nos saca de la más que conocida zona de confort y eso es algo que nos provoca malestar aunque sean cambios en positivo.
Salir de nuestra zona de confort y adentrarnos en la zona de aprendizaje requiere de tiempo, esfuerzo y coraje y no todos estamos dispuesto a ello. Pero es la única forma de avanzar en términos de crecimiento personal y mejora continua.
¿Os suena lo de que estamos inmersos en un entorno V.U.C.A (en inglés Volátil, Incierto, Complejo y Ambiguo)? No nos queda otra que aceptar esa ambigüedad e incertidumbre o nos quedaremos atrás en todos los ámbitos de nuestras vidas.
No parece que la situación económica y social vaya a regresar a parámetros más estables y predecibles, incluso los indicios demuestran que estos entornos inciertos han llegado para quedarse por mucho tiempo. Tendremos que aprender a gestionar los cambios y las transformaciones a nivel personal y profesional para encajar en un mundo que ya no admitirá el “mejor me quedo como estoy” como paradigma reinante.
Cualquier cambio, incluso un cambio para mejorar, va siempre acompañado de molestias e inconvenientesArnold Bennett
Ya hemos comentado que el cambio aunque sea en positivo genera malestar y ansiedad pero la principal causa del rechazo al cambio es el miedo. Lo normal es ver cualquier cambio como una amenaza a nuestro estado actual.
Transitar por la zona de confort nos da mayor seguridad porque estamos habituados a los entornos que se generan allí. Sabemos de ellos, los reconocemos y por lo tanto tenemos un patrón de comportamiento ya establecido que no nos obliga a replantearnos nuestros hábitos. Actuamos de manera mecánica y automatizada sin darnos cuenta que estos comportamientos nos ponen frenos a nuestra potencialidad. Sin cambio no hay crecimiento y sin crecimiento no hay mejora ni desarrollo.
Hay multitud de razones por las que rechazamos el cambio (cada uno tendrá las suyas) pero se observan unos patrones genéricos que nos afectan prácticamente a todos:
Tomar una oportunidad significa estar dispuesto a entrar en acción. Estar dispuesto a entrar en acción significa estar dispuesto a asumir un riesgo. Estar dispuesto a asumir un riesgo significa estar dispuesto a adoptar un cambio. Luego OPORTUNIDAD = ACCIÓN + RIESGO = CAMBIOMichael Levine
Aunque cuesta verlo y es más fácil decirlo que hacerlo, el cambio debería verse como una oportunidad y no como una amenaza. Todo depende de la actitud y de la percepción que tengamos ante las situaciones y entornos que están por descubrir.
Es un camino lleno de obstáculos en el que tendremos que adoptar nuevas estrategias y combinar antiguos conocimientos y experiencias para ser capaces de superarlos y de abrir nuestra mente a situaciones que generen y exploten ese potencial de crecimiento que todos llevamos dentro y que sólo se puede encontrar en la zona de aprendizaje y nunca en la zona de confort.
Esa visión del cambio como oportunidad la podemos potenciar de varias maneras:
Fuente: https://marcvigilante.com/por-que-miedo-cambio/