«Si no vas a ser el mejor, no empieces». Así de tajante se muestra Seth Godin en su libro “The Dip” (el abismo).
Para los que tengáis curiosidad, el abismo forma parte de todo proyecto empresarial o personal. Tanto si vas a prepararte para un maratón, como si vas a montar un negocio o quieres aprender a jugar al ajedrez. Tarde o temprano pasarás una época de dudas, de incertidumbre y tendrás la tentación de dejarlo.
“El abismo” es como un valle entre dos montañas, es lo que separa a los principiantes de los expertos. Es el momento en que a pesar de seguir haciendo esfuerzo no obtienes resultados. Se ve muy claro en este gráfico:
Cualquier persona que comienza un proyecto, es un principiante, la mayoría de las veces, no sabe mucho del tema, no tiene experiencia, pero tiene ilusión. A medida que avanza y va adquiriendo conocimientos, práctica, entrenamiento o destreza en la actividad o proyecto empresarial, va mejorando de manera notable.
Pero llega un momento en que esa mejoría se estanca, se detiene e incluso empeora.
Es el momento en que la mayoría de la gente abandona el proyecto, el entrenamiento o la idea inicial. Cuando las cosas se complican y los resultados tardan en llegar, la mayoría de las personas se desesperan y abandonan.
Y ¿Cuál es el problema?
Abandonar en medio del Abismo supone un gasto de recursos, tiempo y dinero demasiado grandes, porque todo lo que se ha invertido hasta llegar a ese punto se pierde.
Solo aquellos que realmente se han preparado, física y mentalmente para llegar a ser los mejores conseguirán atravesar ese punto y llegar a la otra orilla. La inmensa mayoría abandonará el proyecto, empresa personal o profesional en el peor punto donde pueden hacerlo.
«Sin embargo, los que consiguen cruzar el abismo obtienen resultados extraordinarios.»
Estas personas son a su vez aquellos que, por la razón que sea, son capaces de mantener el esfuerzo e incluso, incrementarlo durante el periodo de su paso por el abismo.
Las estadísticas demuestran que nadie abandona un maratón cuando está en el km 41, donde los aplausos del público le empujan a la meta. La mayoría de los abandonos se producen en el km 32, donde los músculos comienzan a doler, donde comienzas a notar los síntomas de la deshidratación y donde todavía la meta está tan lejos que surgen dudas de si serás capaz de llegar.
Todos los corredores de maratón saben que sufrirán, pero algunos abandonan y otros no. Unos son capaces de superar el abismo porque son más fuertes física y mentalmente y otros simplemente abandonan.
Si alguna vez has hecho deporte y te lo has tomado en serio, verás que se cumple.
A la hora de emprender ocurre parecido. Nadie abandona cuando está a punto de salir al mercado, cuando empiezan las primeras ventas, cuando entra financiación, cuando se abre un nuevo mercado o consigues más clientes… el problema es cuando entras en una zona donde no creces, donde a veces decreces y donde la ilusión y el tiempo disminuyen, mientras el esfuerzo y el tiempo van a aumentando sin ver resultados.
Por eso, si no vas con la ilusión, con las ganas y la idea de ser el mejor, no merece la pena que empieces, porque las probabilidades de abandonar, son más altas.
Pero ojo, no nos equivoquemos… ¿Es una mala opción abandonar? ¿nadie puede dejar un proyecto que no tiene sentido?
Abandonar EN el abismo, es una mala opción porque has gastado mucho para llegar ahí.
Pero…
Abandonar ANTES de estar en el abismo es una BUENA opción. Antes de consumir recursos en una empresa o proyecto en el que no esperas ser el mejor, es mejor dejarlo y centrarte en aquello en lo que sí puedes llegar a ser bueno de verdad.
Esto mismo es lo que persigue la filosofía Lean Startup, que sepas ANTES de llegar a ese abismo si tu idea tiene sentido o no. Que experimentes, que hagas tests en el mercado, que crees tu producto mínimo viable, que analices clientes, modelo de negocio, para que cuando te lances, te lances para tener éxito… y si no, no lo hagas porque perderás dinero, tiempo e ilusión.
Muchas veces he oído la expresión: “Abandonar es de cobardes”.
En mi opinión:
«Abandonar en el momento correcto es inteligente, abandonar en el abismo es una pena.»
Pero sobre todo;
«Los cobardes no abandonan, los cobardes no empiezan.»
Así que recuerda; Si empiezas, hazlo para ser el mejor. De nada sirve quedarse a medias.
Debes luchar para ser el número 1, para atravesar el abismo y llegar al otro lado.
Fuente https://innokabi.com/cuando-abandonar-proyecto-emprendedor/
