Por Carlos S. Ponz , Nacho Bueno
El presupuesto es una de las principales herramientas con las que cuenta una empresa para organizar toda su información financiera. En base a él puede anticiparse en la toma de decisiones sobre elementos clave como la liquidez, la necesidad de redistribuir sus recursos o de buscar financiación, y la implementación de un sistema de control. Para llevar a cabo una adecuada planificación presupuestaria es fundamental tener en cuenta determinadas pautas, como el tiempo, el marco financiero (en especial, en relación al balance y al flujo de caja), así como disponer de un profesional (habitualmente, un chief financial officer -CFO- o un controller financiero) que integre toda la información financiera, la ordene y la distribuya en virtud de los objetivos marcados por la empresa.
Como afirma Mila Pedraza, socia de Kreston Iberaudit, en el webinar ‘Planificación presupuestaria para 2023’, organizado a través de HUB Empresa de Banco Sabadell, “un buen presupuesto empresarial parte de la creación de un comité responsable de su elaboración, que determinará el proceso y las normas formales de ejecución”. Este comité, entre otras labores, realiza una planificación temporal de los presupuestos, identifica a las personas y a los departamentos involucrados y concreta los criterios de cálculo financiero.
A través de este comité, se impulsa la elaboración de:
Tal y como indica en el mismo webinar Nacho Bueno, profesor y CEO de FAI Business Advisory y de Byte4games, el principal objetivo del presupuesto financiero en una empresa “es el de conseguir una óptima coordinación de todas sus actividades, de modo que se pueda más adelante elaborar una planificación en otros ámbitos como los costes de producción, las ventas o las inversiones”.
Este experto destaca que uno de los elementos que más está afectando en la actualidad a la realidad económica de las compañías es la inflación, ya que “está provocando una caída en la rentabilidad real de las empresas porque no se está pudiendo trasladar el incremento real de los costes a los consumidores”. Además, señala otros riesgos de la presente coyuntura que afectan de lleno a la planificación presupuestaria para el año 2023, como el efecto del tipo de cambio, las ineficiencias en las cadenas de suministro, la volatilidad en los precios de las materias primas o la amenaza permanente de los cambios regulatorios.
Además, Bueno afirma que dentro de la planificación presupuestaria “es imprescindible tener muy controlados tanto el fondo de maniobra como el periodo medio de pago, y compararlos permanentemente con el nivel medio de la industria en la que se opere”. En este sentido, este experto subraya el valor de la información que aporta la medición de ciertas variables para la toma de decisiones, en especial, en el caso del ratio de endeudamiento.
Bueno hace hincapié también en que, ante determinadas amenazas como la inflación, es importante que la empresa valore la creación de un gabinete de crisis presidido por el CFO. “Los gabinetes de crisis demostraron su valía durante la pandemia, ya que fomentaron que muchas compañías pudieran renovar con rapidez procesos que se creían inamovibles, salvándolas de la quiebra en muchos casos”.
En cualquier caso, para tener clara toda esta información y cómo abordar un plan presupuestario, es clave contar con el asesoramiento profesional de un gestor del banco, que resolverá cualquier duda y aconsejará qué es lo más adecuado según la situación.
Fuente: https://estardondeestes.com/movi/es/articulos/como-planificar-el-presupuesto-de-una-empresa-para-2023