Un espacio para aprender que no es necesario ser una empresa grande para ser una Gran Empresa
Home » Calidad de Vida » ¿Por qué estamos tan enfadados?

¿Por qué estamos tan enfadados?

Por José María Garrido

Creo que la baja autoestima, que parece crónica hoy en día y que se pone de manifiesto cada dos por tres, es causada en gran medida por un sentimiento de impotencia.

Lo que quiero decir es que las personas tienden a sentir que su vida es el resultado únicamente de la influencia de “poderes externos”: el gobierno, el clima (los desastres naturales), la pandemia, la información capciosa y la desinformación de las redes sociales, el jefe, el propietario, los padres, los cuñados, etc.

Esto se pone de manifiesto cuando, continuamente, señalamos a “otros” (dedo acusador) por las cosas que nos ocurren. La extrapolación extrema sería la predeterminación calvinista: el destino ya ha decidido lo que será de ti.

La respuesta a esto es la utilización de un pseudopoder “contra” los demás, y tengo la sensación de que esta situación se ha agravado después de la pandemia (con frecuencia mi pareja y yo lo comentamos en nuestra vida diaria normal). Bicicletas o patinetes que te atosigan en las zonas peatonales, gente que se cuela para entrar al cine o al coger un avión, o individuos que intimidan a otros en las redes sociales enmascarados en el anonimato.

Y no digamos cuando vas conduciendo: no se usa el intermitente, no ceder el paso para incorporarte al salir del parking o bruscos giros en las rotondas.

La alta autoestima es un requisito para el éxito. Eso significa que debes ser consciente y afirmar tu poder personal, lo cual empieza por asumir tu propia responsabilidad de controlar tu vida inmerso en las circunstancias que te rodean (no señalar a otros, sino señalarte a ti mismo para empezar a gestionar tu situación). Porque tú sólo puedes actuar sobre ti y tomar tus propias decisiones.

Hay cosas fuera de tu control, pero si hace mal tiempo puedes realizar tu evento en el interior, si quieres evitarte problemas con Hacienda puedes tener un buen asesor fiscal, y un pariente que arruina las reuniones familiares no tiene por qué ser invitado en el futuro.

Por eso creo que la Plegaria de la Serenidad tiene mucho sentido, que parafraseándola sería algo así: no te preocupes por las cosas que no puedes cambiar, concéntrate en lo que puedes controlar y aprende a diferenciar entre las dos.

Lectura relacionada  Los 10 hábitos (comprobados) que te hacen mentalmente fuerte

Porque también es muy conveniente recordar que, si crees que no hay factores externos y que tú, personalmente, tienes el control total de todo, o bien has estado expuesto a demasiados “oradores motivacionales” o has bebido demasiado.

Fuente: https://www.garridofreshmentoring.com/por-que-estamos-tan-enfadados

Si quieres ver más posts de la misma categoría, haz click aqui:


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.