Entrevistas laborales en las PyMEs: cómo elegí al talento indicado

No conocer al otro es un proceso que necesita de un desarrollo para convertirse en una realidad.

Por más distendida que sea la entrevista o por más profundo que se quiera indagar con las preguntas, siempre queda la duda de quién es quién.

Al igual que nadie conoce a una pareja en la primera cita, o como no se sabe si un departamento es el ideal para alquilar en esas visitas de cinco minutos un día de buen sol y baja humedad.

Cuento con el instinto de leer CV’s que me quedó por haber sido parte del equipo de selección de call center, y con ello pude descifrar quiénes solo tenían un talento para la redacción del CV, o como se dice informalmente “aquellos que saben chamuyar”. Un tip al respecto es buscar la coherencia entre lo que estudió y los puestos de trabajo desempeñados.

Pero una vez terminada la lectura, llegó el momento de la entrevista. Para lo cual pensé algunas preguntas que me guiaran en la charla:

• Presentación del puesto y la empresa, ya les confesé mis sospechas de que quienes se postulan capaz lo hacen sin saber que se trata de una PyME y un puesto a crear.
• Presentación personal con énfasis en su recorrido laboral para que me cuenten por qué se fueron del último trabajo (un dato que, según aprendí en mis tiempos de reclutador, nos puede dar mucha información de la persona).
• Conocimientos técnicos y académicos, si bien no tenía una exigencia particular, pienso que esto no solo habla de sus calificaciones para el puesto, sino de sus intereses personales.
• Pretensión salarial, clave para avanzar.

Terminé la primera entrevista, y me quedé con ese sabor a poco. Cuarenta minutos no habían sido suficientes para conocer a la persona.

Así que para las próximas sumé algunas preguntas y así llegué a “cómo te resulta trabajar en equipo”, “contame una experiencia que te haya marcado en tu recorrido laboral” y juro haber estado tentado a usar esas preguntas odiosas de departamentos de recursos humanos del estilo “si tuvieras que reflejarse en un animal cuál sería y por qué”.

Pero de haberlo hecho no hubiese sabido interpretar la respuesta y hubiese sido un mal momento en vano.

Quise creer que mi instinto era suficiente para elegir, pero por más evidencias que tratara de encontrar con mis preguntas, había algo que faltaba.

Finalmente, se me ocurrió una idea.

Capaz era mucho para este puesto de trabajo, y de vuelta esa sensación de que nuestra PyME no es suficiente, pero había escuchado que era una práctica común en los procesos de búsqueda.

“Hacer un caso” es, para quienes estudiaron carreras de administración, algo normal.

Es leer la experiencia de algunas empresas del mercado y con el análisis de los datos proporcionados en el paper proponer soluciones posibles.

Pretendí escribir el mío propio, pero resultaba por demás complejo y fue así que acudí a uno de los que me habían dado de tarea en mi cursada de MBA.

Y así fue como la brecha entre el potencial de la persona y mi capacidad para verlo, empezó a achicarse.

Todavía me quedan muchas dudas de quién va a ser el ideal y si voy a ser capaz de generar una cultura empresarial que no se dinamite cuando empiecen a entrar terceros, pero por ahora estoy acá, tratando de leer entre líneas quién es quién.

Fuente: https://www.a24.com/pymes/entrevistas-laborales-las-pymes-como-elegi-al-talento-indicado-n1251415