Por Carlos Alberto Rossi
En mi cabeza hay una palabra que retumba desde hace ya, un par de años: MODELO MENTAL.
Según Kenneth Craig, un modelo mental es un mecanismo del pensamiento mediante el cual, un ser humano, u otro animal, intenta explicar cómo funciona el mundo real.
Es un tipo de símbolo interno o representación de la realidad externa, hipotética, que juega un papel importante en la cognición, es decir, en la facultad de un ser vivo para procesar información a partir de la percepción, el conocimiento adquirido (experiencia) y características subjetivas que permiten valorar la información.
En resumen, los componentes que dan funcionalidad al modelo mental son procesos tales como el aprendizaje, el razonamiento, la atención, la memoria, la resolución de problemas, la toma de decisiones y el procesamiento del lenguaje.
Cuando uno analiza el modelo mental, y la forma de modular la cognición, se hace evidente que, cualquier falencia o error en algún punto de su estructura, puede distorsionar la comprensión de la realidad.
Si bien el concepto de modelo mental es universal, ahora me enfocaré en el accionar en líderes, sin importar tipo de organización, negocio, institución, etc.
La estructura y funcionalidad del manejo de información en un modelo mental, es universal, y solo hace la diferencia en el accionar conductual, la información recibida y procesada, de acuerdo a varios factores como ser emociones, patrones de reverencias aprehendidos, etc., por el líder, desde su nacimiento, abarcando esto, datos, información, los principios, valores, creencias.
Los factores que disminuyen la eficacia del pensamiento son:
Como se puede ver, ambos factores están basados, en suposiciones generadas por nuestro intelecto, que tienen sus bases en temores y la decodificación de la percepción, por medio de toda nuestra experiencia y conocimiento previo de la vida en general.
Ahora voy a dar ejemplos claros de cómo preconceptos y prejuicios alteran la efectividad en la gestión de los líderes.
Primero debemos decir que los prejuicios pueden estar generados por distintos preconceptos, como, por ejemplo:
Considerando que, para los líderes, al llegar a sus puestos jerárquicos, ya han transcurrido años de afianzamiento de su modelo mental, y posiblemente de prejuicios originados por preconceptos erróneos, es muy posible que les hayan ocurrido roces en sus relaciones interpersonales, por ende, pueden haber generado malos climas de trabajo en sus equipos, desmotivación y baja del rendimiento grupal e individual, de acuerdo a como cada seguidor ha vivido esta experiencia.
Prejuicios y su influencia en diferentes habilidades:
Podríamos nombrar un sin número de problemas relacionados con los prejuicios, hasta roturas de matrimonios por sospechas infundadas, y en otro ámbito de la vida, asesinatos a encargo, etc.
Los prejuicios y preconceptos quitan claridad de pensamiento que afectan directamente, el sentido común, la imagen del líder y la efectividad de su gestión.
En una palabra, los líderes para poder ser de Clase Mundial deben trabajar en la diversidad, con apertura mental, con perfil multidisciplinar y enfoque en resultados, buscando eliminar aquellos prejuicios que alteran su armonía MENTE-CUERPO-ESPÍRITU. Solo de esta forma podrán ser de utilidad a sus equipos de trabajo. Llego la hora de considerar el MINDFULLNESS como equilibrio de la energía del pensamiento y relaciones.
Fuente: http://negociosymanagement.com.ar/?p=8156