El Consejo de Familia en la empresa: un faro para guiarte en tiempos turbulentos

por Mario Rizo Rivas

En la empresa familiar es importante detectar y reconocer las fallas y errores en el desarrollo del trabajo cotidiano de los familiares que la dirigen o administran para corregirlos de inmediato y hacer conciencia, tratando de evitarlos en situaciones futuras. Esta es una función estratégica del Consejo de Familia.

Cada empresa familiar es única, aunque todas tienen un reto en común: orientar la empresa hacia el crecimiento, manteniendo al mismo tiempo la armonía familiar. Esta es la principal tarea del Consejo de Familia.

Hoy en día, las empresas familiares tienen ante ellas un camino un tanto escabroso y retador que deberán recorrer si o si para asegurar su continuidad. Además de reforzar las operaciones de la compañía y crear un conjunto de planes alternativos y de contingencia ante este paisaje incierto. El fundador de la empresa familiar y los suyos, tendrán que establecer; o restablecer, canales sólidos de comunicación entre ellos y unir esfuerzos ante los riesgos reales y potenciales que los rodean, tanto al interior del negocio como fuera de él.

La economía mundial actual se nos presenta como un turbulento mar, lleno de misterios en donde la oscuridad nos impide observar lo que tenemos justo frente a los ojos. Para poder iluminar esta escena, existe una importante estructura que se convertirá en una guía ante los retos cada vez mayores y complejos que enfrentan las empresas y sus familias. Permíteme platicarte sobre el consejo de familia.

Las empresas familiares son aquellas que trascienden a través de las generaciones, evolucionando, creciendo y adaptándose a los cambios en los mercados que, puedo asegura a título personal, hoy son inéditos y serán cada vez más profundos.

El Consejo de Familia es un órgano formal de las empresas familiares. Su objetivo principal es fomentar la organización de reuniones donde los participantes; todos miembros familiares, pueden tratar temas relaciones tanto con la familia como con las empresas, así como situaciones internas que merecen ser conocidas, entendidas, analizadas y resueltas por parte de sus miembros. La asistencia a estas reuniones es obligatoria para los consejeros familiares.

Uno de los objetivos básicos del Consejo de Familia es redactar de manera formal y ¡por escrito! La misión, visión y valores familiares, estatutos que servirán de base para el comportamiento de los integrantes de la familia nuclear y extendidas.

Cuando tu consejo de familia revise estos pilares de la empresa, recuerda que pueden o no tomar en cuenta asuntos espirituales o religiosos aceptados por todos en la familia, así como tradiciones y costumbres arraigadas durante décadas e importantes para que las nuevas generaciones conozcan sus raíces y los preceptos que los mantiene unidos.

Los valores de toda la familia son vitales y es necesario que procures vivir y aplicar los de tu familia día con día. Los huracanes y otros vientos por venir pueden afectar a las empresas e intentar dividir familias, pero si sus integrantes saben de dónde vienen, el Consejo de Familia podrá arrojar luz al camino y será más fácil definir hacia dónde deben dirigirse, manteniéndose unidos.

Tu familia debe presentar un frente común ante los problemas en los negocios; si no lo hacen, los conflictos y tensiones entre los accionistas, directivos y sus familiares podrían desencadenar problemas que; como una bola de nieve, podrían crecer tanto que se harían insalvables, y en esas situaciones todos pierden.

Las épocas de crisis complican los aspectos económicos y patrimoniales de las empresas familiares. En ocasiones, esas expectativas irreales de poder cubrir a todos los miembros de la familia bajo el paraguas patrimonial no pueden ser cumplidas cuando la cruda realidad se hace presente, por lo que las disputas podrían aparecer. El Consejo de Familia debe estar preparado para manejar este tipo de conflictos, además de preparar alternativas para la solución de estos.

Un tema muy importante, que tal vez no consideres relevante en este momento, es que tu Consejo de Familia fomente el crecimiento de sus miembros, permitiendo su capacitación como seres humanos integrales y organizando todo tipo de eventos para que los miembros de la familia convivan entre ellos. Recuerda que, en un futuro cercano, todos ellos podrían participar como accionistas, consejeros o directivos en tu empresa familiar.

Otra atribución del consejo de familia que pocas veces es tomada en cuenta es que este también tiene la tarea de detectar, en forma discreta pero contundente, problemas psicológicos, adicciones y otras conductas destructivas que afecten a los miembros de la familia, la propia empresa y su entorno.

Me gustaría recordarte que el Consejo de Familia es el órgano introductorio de los miembros de la familia a la empresa. Es el primer canal a través del cual la compañía entrenará a los familiares, enseñándolos a ser profesionistas, y podrá separar entre los roles de accionistas, empleados o miembro de la familia para generar madurez emocional y profesionalización en las futuras generaciones, procurando darle continuidad y crecimiento a la empresa.

Como padre de familia, uno quiere conservar a los suyos unidos y busca que se mantenga una buena relación a pesar de que el tiempo y las diferentes experiencias que vivan los distintos miembros de la familia, le forje un carácter distinto a cada uno. Llevar a cabo un Consejo de Familia puede ser la solución a esta controversia que afecta a la mayoría de las familias, ya que cada una vive situaciones distintas a las demás.

Al tener un Consejo de Familia, le das la oportunidad a todos los miembros de la familia nuclear, de tener un espacio específico donde sus inquietudes, ideas e inconformidades pueden ser escuchadas con transparencia y libertad de expresión; siempre conservando el respeto hacia los demás, de tal manera que los resentimientos y conflictos se pueden minimizar y tratar de la manera más adecuada y armónica posible.

Por ejemplo, en un caso hipotético, una familia está conformada por los padres y dos hijos, los cuales trabajan dentro de la empresa familiar. El hijo mayor tiene una trayectoria considerable dentro de la empresa, empezó desde abajo y con base en estudios y esfuerzo ha ido creciendo, sin embargo, el hijo menor a penas se está integrando a la empresa y considera injusto que su hermano gane más dinero que él, a pesar de que los dos son hijos del dueño.

En este caso, el contar con un Consejo de Familia haría una diferencia considerable, ya que tendría la obligación, en primer lugar, de establecer reglas y lineamientos sobre los requisitos y condiciones en las cuales los hijos y demás miembros familiares futuros, puedan ingresar a trabajar a la empresa familiar, así como diferenciar los roles de accionista, colaborador y miembros de la familia. De tal manera que no haya confusiones ni malentendidos.

Sin embargo, si no hay reglas o un órgano de gobierno familiar que ayude a mitigar estos riesgos, el hijo menor podría crecer dentro de la empresa con resentimiento y hacer de una pequeña confusión, un problema que separe a la familia en un futuro.

Ahora ya sabes un poco más sobre el Consejo de Familia, esta herramienta tan útil para la salud de las empresas familiares; si tu compañía todavía no cuenta con uno, o este no está bien establecido ¿Qué esperas para hacerlo? Sólo puede generarte beneficios.

Fuente: https://www.forbes.com.mx/el-consejo-de-familia-un-faro-para-guiarte-en-tiempos-turbulentos/