por Ale Navarro
Con la llegada de las Fiestas Navideñas, aflora en algunas personas una cierta susceptibilidad: Emociones que regresan, recuerdos, añoranza a seres queridos que ya no están, nostalgia; y en otras, la llegada de estas fechas es motivo de euforia, de alegría, de terminar el año haciendo balance y de proponerse un año próximo diferente y lleno de buenos deseos.
Nuestra vida va cambiando año tras año, y en mi caso, ninguna navidad suele ser la misma del año anterior; no solamente porque las circunstancias de mi entorno van cambiando, sino porque yo misma voy cambiando.
El cambio para mí, es una oportunidad, es dejar de hacer lo mismo haciendo algo mejor y diferente. La vida es un constante cambio y pienso que toda persona tendría que estar preparada para estos momentos.
Al vivir una situación problemática, podemos quedarnos ahí, creyendo que no podemos hacer nada para cambiar y metiéndonos en el papel de “víctimas” o por el contrario podemos sentirnos “responsables” para empezar a cambiar.
La primera visión que tenemos es que hay que cambiar al mundo o que las demás personas cambien; nunca nos detenemos a pensar que el cambio comienza por uno mismo.
No hay fórmulas mágicas para lograr el cambio que deseamos. Cada persona tiene un determinado proceso.
El primer paso de un proceso de cambio es darse cuenta de la situación de partida, sin esta base una persona no puede comprometerse a mejorar.
Las preguntas que nos haremos:
Al poner la atención en lo que queremos, el problema se convierte en una pregunta, cambiando así los pensamientos, emociones y repercutiendo en la conducta que irá hacia el objetivo si se tiene la suficiente motivación.
Para lograr un cambio positivo en tu vida ten en cuenta que:
Existen dos tipos de cambio:
El cambio requiere una buena dosis de valor; salir de lo cómodo y lo rutinario, se convierte a veces en una aventura difícil de emprender. Sin embargo, si buscas una motivación más grande y más fuerte que el propio dolor de estar donde estás, no lo dudes, muévete. Imagina ya viviendo ese cambio: ¿Cómo te sentirás? ¿Qué verás? , imagina, sueña, vívelo, siéntelo…
Fuente http://www.coachingtimes.es/te-atreves-cambiar