por Alberto Conti
Se cuenta que en una entrevista exclusiva interrogaron a Bill Gates: “¿Por qué Latinoamérica no ha producido un nuevo Bill Gates?”, “Usted, ¿se habría podido convertir en el innovador tecnológico de más éxito en el mundo, y en uno de los hombres más ricos del planeta, si es que hubiera nacido en Paraguay, por ejemplo?”
Gates dijo que. “En casi todos los lugares del mundo en que podría haber nacido, no habría tenido las increíbles oportunidades que tuve aquí: tuve una muy buena educación, y fui increíblemente afortunado en cuanto a las circunstancias que me tocaron. En todos los países ricos, y también en Latinoamérica, el número de jóvenes que eligen dedicarse a la ciencia y a la ingeniería es sorprendentemente bajo. El Billonario sugirió que para cambiar este cuadro y provocar esta posibilidad, lo primero que habría que hacer sería mejorar la educación secundaria y, lo segundo, mejorar las universidades”.
Creo que Bill Gates tiene razón, la verdad es que dejamos mucho que desear con nuestra educación en America Latina. Pero por mi parte, tengo esperanzas, a pesar de los comentarios del experto, que en los días de hoy, prefiero creer de que nada es imposible y que existen grandes posibilidades a que surjan nuevos emprendedores exitosos de la Nueva Economía en Latinoamérica.
Al leer los comentarios de Bill Gates podemos reaccionar de dos maneras, o nos frustramos ya que la posibilidad de que ocurran cambios drásticos en la educación en Latinoamérica es un desafío a largo plazo. O más bien podríamos optar por no perder las esperanzas y creer que se puede lograrlo en nuestra región.
En mi caso, prefiero ser optimista. Es porque creo fervientemente en el potencial del 3º mundo. Creo en Latinoamérica y en el inmenso valor que tiene su gente. Creo en el talento creativo de sus jóvenes. Creo en Latinoamérica como una región emergente que será impulsada por una nueva generación de emprendedores inteligentes que causarán un impacto tremendo en la economía de su países. Creo que si nuestros jóvenes tuviesen la oportunidad, nuestra región seria otra usina mundial de genios informáticos. Por eso me atrevo a imaginarme que gente igual o superior a Bill Gates estaría por producirse en los próximos años.
Soy también de los que creen que a America Latina le hacen falta más emprendedores. Porque el surgimiento de más emprendedores con resultados significarían en mas fuentes de creación de riquezas y en nuevos flujos de ingresos para las naciones. Por eso afirmo que el mayor desafío de los lideres gubernamentales en los dias de hoy es incentivar el desarrollo tecnológico, impulsar la actividad emprendedora, facilitar la creación de empresas en vez de ponerle tantos frenos.
Hace unos meses atrás leí el informe de una investigación difundida por los medios, que mencionaba a la Argentina liderando el ranking de los emprendimientos fracasados. Si bien es uno de los países con mayor tasa de emprendedores (14,2 %) después de Chile y Corea, seis de cada diez emprendimientos naufraga antes de cumplir el primer año. La cifra de emprendimientos fracasados es alarmante.
Juan Manuel Gonzales Cerda, en su articulo “El empresario que llevas dentro”, declaró que es difícil entender que con el grave desempleo existente para iniciar una nueva pequeña o mediana empresa aún tengamos que pagar impuestos en los tramites y pagar por obtener una licencia y registrar una sociedad anónima, y peor aún, que tengamos que lidiar con funcionarios que no comprenden que su verdadero trabajo es facilitar y no entorpecer la creación de empresas. Es de veras muy desalentador observar al Estado que se ha empeñado en poner tantas trabas en vez de facilitar la actividad emprendedora.
Cuando pienso en los gigantes asiáticos como Singapur, Taiwan, Corea del Sur, Hong Kong, que emergieron de la pobreza en apenas 4 décadas, y llegaron a ser hoy en dia grandes potencias económicas. Cuando medito en el modelo exitoso de restructuración de post guerra, como lo hicieron Japón y Alemania, países que actualmente se ubican entre las 15 primeras economías del mundo; acabo cuestionándome: Cuanto tiempo más le llevara a Latinoamérica para tornarse en una región financieramente prospera?. Hasta cuando seguiremos siendo los últimos de la lista? Que cambios significativos debemos implementar? Que estrategias necesitamos desarrollar para ser una región emergente?
Hemos visto a países como Suecia, Noruega o Irlanda, que han forjado su crecimiento en base al desarrollo tecnológico que se ha alcanzado en cada una de estas naciones. Se dice que Silicon Valley es sin lugar a dudas el mejor modelo de creación de riqueza de todos los tiempos. Tal como sucede en Estados Unidos con Silicon Valley, la posibilidad de tener un polo de desarrollo tecnológico en los principales países de America Latina podría traer múltiples beneficios para la economía de la Región.
Esta iniciativa seria sumamente trascendente, trayendo consigo un avance del conocimiento y una atracción empresarial que generaría divisas millonarias para cada país. Entiendo que en la mayoría de los países esta idea puede llegar a ser utópica por causa de la magnitud de todo lo que se requiere para poner en marcha un megaproyecto de estos. Pero la idea de crear un tipo de Silicon Valley en cada país de America Latina aunque parezca descabellada puede llegar a ser una de las soluciones para revertir nuestra deprimente realidad social.
La cuestión imperativa es que nuestra región del planeta precisa desesperadamente de nuevos emprendedores. Pero yo me inclino más bien a defender las ideas innovadoras del emprendedor inteligente que ha sabido aprovechar a tiempo las tendencias de esta nueva era de oportunidades.
Sostengo que para disminuir estas estadísticas vergonzosas necesitamos de un nuevo perfil profesional de emprendedores. La esperanza para nuestra región es darle paso a la nueva generación de profesionales que hoy está marcando la diferencia, y es la generación del emprendedor inteligente.
QUE ES UN EMPRENDEDOR INTELIGENTE?
En fin, sugiero de que “veamos más alla de los 4 dedos” como le decía un amigo al Dr. Patch Adams, para que vislumbremos las oportunidades únicas que están delante de nosotros en este momento tan excitante de la historia y no enfoquemos solo en los problemas. Seamos optimistas ante los grandes desafíos sociales que tenemos. Optemos por esperar siempre lo mejor, la victoria está a la vuelta de la esquina! Creamos que lo mejor siempre está por venir. Tener esta actitud correcta en los momentos de crisis siempre nos traerán muy buenos frutos.
Autor Alberto Conti
Buen artículo. Allá donde empieza a crecer un nuevo nicho de mercado es donde debe estar el emprendedor. Gracias al emprendedor la economía se sustenta y crece generando empleos entre otras cosas. La situación económica mundial hace que las politicas y gobiernos no inviertan en ayudas y formación para ayudar a montar un negocio por eso el trabajo online cada vez esta tomando mayor importancia. Latino américa es un buen espacio para ello.